Opinión

Delfín Quezada Domínguez

Comenzar a redactar este documento ha sido un poco tormentoso por lo confuso del manejo de las cifras acerca de las causas de la muerte en nuestro estado de Yucatán. Y esta confusión proviene, más que nada, de los números que diariamente se manejan en las estadísticas estatales –hago la aclaración pertinente– sobre los fallecimientos a causa del COVID-19, fenómeno epidemiológico mundial que ha trastocado de manera impresionante las esferas sanitarias, económicas, sociales y políticas de muchas regiones, y en Yucatán no ha sido la excepción.

También quiero dejar bien claro que la intención de escribir esta colaboración para el Diario siempre digno, POR ESTO! no es crear polémica, sino más bien, poner en perspectiva la situación de las principales enfermedades causales de muertes en Yucatán, tomando como base los años 2015 y 2018. Posteriormente, que los representantes de la Secretaría de Salud del Estado nos digan, a través de una explicación objetiva y clara, la metodología de cómo ellos separan o identifican a los que fallecen por el COVID-19, de aquellos que fallecen con enfermedades previamente detectadas. Por ejemplo, en el 2015 fallecieron cerca de 11 personas diariamente por las siguientes enfermedades: diabetes mellitus, 1,526; enfermedades del hígado 1,065; influenza y neumonía, 609; enfermedad pulmonar obstructiva [Epoc] (a causa del tabaquismo), 309; insuficiencia renal, 288. No estoy agregando a esta triste lista aquellos que fallecieron de enfermedades isquémicas del corazón (3,018), pues de hacerlo duplicarían la cifra de las 5 primeras enfermedades que enlisté (llegando a 22 fallecimientos aproximadamente por día).

La fuente de estos datos proviene del INEGI, del año arriba señalado. Se sabe que en Yucatán la principal causa de muerte son los infartos agudos al miocardio, que están estrechamente relacionados con la diabetes mellitus, que es la segunda causa de defunción y que se da principalmente por problemas renales. Cada año se diagnostican en promedio cinco mil casos nuevos de diabetes en el Estado. En quinto lugar se encuentran las enfermedades cerebrovasculares, conocidas comúnmente como embolias, que están relacionadas también con la diabetes, el sobrepeso y la obesidad, otro problema que impacta severamente en la salud de los habitantes de Yucatán. La influenza y neumonía son enfermedades que también se encuentran en las principales de causas de muerte en yucatecos, ocupando el sexto lugar.

En el año del 2018, Abigail Orús publicó un listado de las principales causas de mortalidad en el Estado de Yucatán, y la cual se puede encontrar en la siguiente dirección https://es.statista.com/estadisticas/650267/principales-causas-de-mortalidad-en-el-estado-de-yucatan/.

Esta estadística presenta, como señalamos, el número de personas que fallecieron en el Estado de Yucatán en el 2018, desglosada por causa de muerte. En ella hago sobresalir las enfermedades similares al año 2015, en donde podemos observar ciertas similitudes entre períodos en el número de fallecimientos. Estás son:

Enfermedades del corazón, 2,927; diabetes mellitus, 1,443; enfermedades del hígado, 1,126; enfermedades cerebrovasculares, 733; influenza y neumonía, 722; enfermedades pulmonares obstructivas crónicas (Epoc), 314; insuficiencia renal, 257; bronquitis crónica y la no especificada, enfisema y asma, 69; desnutrición y otras deficiencias nutricionales, 77; anemias, 65.

El asunto de enseñar este listado de enfermedades y el comparativo que hago de los años 2015 y 2018 es para demostrar que el número de fallecimientos al año en el Estado de Yucatán es un promedio de 20 personas, tomando sólo de referencias las enfermedades que siempre acompañan al COVID-19 (diabetes, Epoc., influenza, neumonía y asma, enfermedades del hígado, obesidad y enfermedades del corazón). Por tanto, valdría la pena que se clarifique y explique a la sociedad si el COVID-19 aumentó el número de fallecimientos por ser un detonante externo, y ¿cómo separarán a los fallecidos por el coronavirus de aquellos que ya estaban dañados en su salud previamente? Porque si tomamos como referencia el número de fallecimientos al día por COVID-19, podemos inferir que no hace diferencia con los que han existido (hablamos de los fallecimientos) de años anteriores.

Se nos pide que acatemos muchas medidas precautorias para no contraer el virus y ser infectados, pero no se ha planteado ni fundamentado con claridad un panorama amplio de las causas y consecuencias que conlleva esta susodicha pandemia a nuestra salud.