José Revueltas fue uno de los escritores más importantes de México, nació en Santiago Papasquiaro, Durango, el 20 de noviembre de 1914.
Su primera esposa fue Olivia Peralta, con quien tuvieron una hija, Andrea, quien fue madre de Gilda Cruz Revueltas, mi amiga. Ella heredó el talento de su abuelo. A Gilda la habré conocido hace unos 15 años, para que proyectáramos su documental Azul, viento del Norte, sobre la vida y obra del cinefotógrafo Janusz Poland.
Hemos organizado homenajes a Pepe, su abuelo, en varios lugares. Uno de ellos, fue en la biblioteca municipal Jaime Torres Bodet de Playa del Carmen, en 2019, donde asistió, Marcela Bodenstedt (ella vive aquí), también promotora cultural, y nieta de la actriz Rosaura Revueltas, hermana de Pepe.
En este paraíso caribeño, el 2 de octubre de ese año, realizamos un programa sobre el movimiento estudiantil, que se transmitió en vivo en la entonces radio del Ayuntamiento, leímos parte del artículo de Gilda, que escribió sobre la participación de su abuelo, en 1968, se titula José Revueltas y su hija Andrea Revueltas en el 68.
Gilda tiene dos libros interesantes: Estaciones en el ascenso a la montaña, donde se inspiró en el cerro del Tepozteco, para escribir poesía japonesa llamada Haikú. Gilda vive en ese rincón morelense. Y el libro La revolución de las jacarandas, que es poesía más enfocada a la protesta social.
Gilda estudió artes plásticas en la UNAM y antropología en la ENAH. Recientemente montó una exposición pictórica, titulada Opus 23, inspirada en el cubismo de Pablo Picasso, bajo una perspectiva mexicana y femenina, en la librería Rosario Castellanos, del Fondo de Cultura Económica (FCE), en la CDMX.
Su hija Ada Carasusan es para mí de las mejores cantantes de México, he tenido la oportunidad de entrevistarla varias ocasiones. Igualmente heredó el talento de su bisabuelo José Revueltas. Como solista ha compuesto varias canciones en estilo pop alternativo, indie, jazz.
Me identifico por la letra de su obra -también escribe poesía palindrómica, y porque compartimos gustos similares por varios artistas como David Crosby y Neil Young, quienes formaron parte de la banda CSN&Y, me encanta Long Time Gone. Así como el rock clásico con The Doors, Pink Floyd, The Beatles. El punk de Patti Smith o el jazz con Ella Fitzgerald, Coltrane, y Miles Davis. En español Santa Sabina y La Barranca.
Mi amiga Ada va cantar junto a su banda, este martes, en el Zócalo de la Ciudad de México, a las 6:00 pm, la entrada es gratuita, lo organiza el Gobierno de la CDMX. Siempre ha sido un sueño para ella, porque “es uno de los lugares más icónicos no sólo de México, sino del mundo, es por eso que está emocionada de compartir su canto con la gente en ese lugar tan representativo”.
Para Ada Carasusan “hacer música es una forma de transmutar sus emociones, de sanar, de conectar con las personas y conectar con algo más allá de ella. Piensa, que la música tiene el potencial de volvernos mejores personas, más sensibles y empáticas, pero también lo opuesto, por eso cree, que hacer música, es una gran responsabilidad a la que debe darse un buen uso”
Ada publicó el libro Quién soy sobre poesía en forma de adivinanzas, acerca de la naturaleza del Estado de Morelos (su tierra). Me gustaría que, con el apoyo de los gobiernos de Campeche, Yucatán, y Quintana Roo, Ada escribiera un libro similar, sobre el jaguar, la selva, el henequén, y el mar Caribe y que los niños hagan las ilustraciones y se escriba en español y maya. Espero que las pinceladas de Gilda, junto con el canto de Ada, se presenten en las librerías del FCE que se abrirán en el Tren Maya, así como en los Fuertes de Campeche y Bacalar, y en zonas arqueológicas de la península, como Ixcabal.