Por Olivia Vázquez
Aunque Cancún logra mantenerse a flote en sus operaciones turísticas con promociones y ofertas agresivas que le permiten sostener indicadores arriba del 60% en su ocupación, los pocos hoteles de gran turismo que operan con el plan europeo sufren la mayor caída de los últimos años, con operaciones que apenas y activan el 30% de su oferta hotelera, lo que pone a este sector en una verdadera crisis.
Se trata de la hotelería de gran turismo que todavía se sostiene en el destino, y que aunque representa un promedio de 800 habitaciones solamente, es el segmento que atrae al turismo de mayor poder adquisitivo que busca calidad en el servicio de hospedaje.
Este turismo no tiene temporalidad, y suele visitar los destinos que ofrecen esa calidad y esa exclusividad en sus viajes, sin embargo, en el caso de Cancún, mucho de este segmento turístico se perdió con la conversión que realizó la mayoría de la hotelería hacia el todo incluido para atraer a un turismo masivo de menor poder adquisitivo que busca todo el servicio dentro de su viaje a un menor costo.
La hotelería de gran turismo que opera en el destino todavía, apenas y se sostiene en la temporada y aunque también se han hecho sacrificios en la tarifa para atraer más clientes, este segmento no ha logrado el repunte esperado.
En el caso del todo incluido, la promoción agresiva y el sacrificio de tarifa que se ha dado (30% en promedio) ha permitido conservar niveles de operación del 55 y 60% en esta temporada, sin embargo, en el caso de la gran hotelería, las operaciones no son favorables y se prevé que así continúen por lo menos hasta mediados de noviembre, cuando el mercado norteamericano pudiera tener una reactivación.
Por hoy, y de acuerdo al barómetro de la Asociación de Hoteles de Cancún, la caída ya toca el 28.6% y apenas y mantiene un promedio en el mes del 41.3%, siendo el indicador más bajo de las operaciones hoteleras.
En este sentido, hoteleros del destino reconocen que el turismo de mayor poder adquisitivo se ha perdido en el mercado, pues este turismo no busca ni se incentiva por una promoción o descuento en el hospedaje, sino se rige por la calidad y la exclusividad del servicio y en ello, Cancún tiene pocas habitaciones que ofrecer a sus visitantes.
En el caso de las plataformas de hospedaje que hoy operan en el destino, se reporta que este tipo de turismo que viaja en su propio avión o yate, podría estar migrando a un servicio más especializado que se activa con residencias, haciendas y hasta yates que pueden ser alquilados por estas personas de alto poder adquisitivo que buscan esa exclusividad y nueva experiencia y que están buscando ahora esa vivencia en la región.