Por Gerardo Reynoso
El sector hotelero de Quintana Roo apoya la iniciativa del gobierno del estado, de establecer la regulación de las plataformas digitales de rentas vacacionales, tipo Airbnb, por medio de la Ley del Impuesto al Hospedaje.
La Ley será incorporada con obligación a cargo de personas físicas y morales que presten servicios de alojamiento turístico en inmuebles particulares en los 11 municipios de la entidad.
El incumplimiento de la ley alcanzaría multas de 24 mil a 48 mil pesos. La sanción también aplicará para los terceros que intervengan en la prestación de ese servicio, incluyendo a las agencias y plataformas digitales, como Airbnb.
De acuerdo con el exasesor de la Asociación de Hoteles de Cancún y Puerto Morelos, Alejandro Alvarado Muro, la medida era esperada ante el crecimiento desmedido de las plataformas digitales de hospedaje.
“El hecho de que el gobierno del estado pueda fiscalizar, contribuirá a que se dé una competencia en los mismos términos para todos aquellos que han encontrado en las rentas vacacionales digitales, una forma de ingresos”, puntualizó el entrevistado.
El proyecto de fiscalizar a las plataformas digitales de hospedaje, se basa en dos etapas, de las cuales la primera se llevaría a cabo en el mes de enero próximo, debido a la relevancia del asunto.
Esta primera etapa consiste en formalizar un padrón de contribuyentes por medio de la Recaudadora de Rentas; por lo cual todos aquellos que renten sus casas o departamentos para Airbnb tendrán que darse de alta y obtener una licencia de funcionamiento.
La licencia de funcionamiento se dará sólo si el solicitante cumple con parámetros de seguridad turística establecidos por la ley. El permiso tendrá un costo que será establecido por el gobierno estatal.
Con esta medida se lograrán dos objetivos. El primero será tener una cifra real de cuantos inmuebles particulares son utilizados bajo el formato de rentas vacacionales digitales. El segundo es el hecho de lograr recaudación vía este concepto de turismo.
En cuanto a la segunda etapa se refiere, el gobierno del estado dará un período de tolerancia para que todos aquellos que trabajan bajo el formato tipo Airbnb se registren en el padrón de contribuyentes; una vez terminado el plazo, se procederá a las multas económicas antes mencionadas.
Con esta medida, el gobierno del estado proyecta recaudar el próximo año la cantidad de un mil 626 millones 331 mil 651 pesos, por impuesto al hospedaje, cantidad que representa 246.5 millones de pesos más a los proyectados en este 2018, cuando se aprobó una recaudación de un mil 379 millones 782 mil 707 pesos de impuesto al hospedaje.
En la Ley del Impuesto al Hospedaje será incorporada la obligación a cargo de las personas físicas o morales que presten servicios de hospedaje o alojamiento en inmuebles particulares, de inscribirse en el Padrón Estatal de Contribuyentes y obtener su licencia de funcionamiento.
Dentro de este contexto, Roberto Cintrón Gómez, presidente de la asociación, explicó que un estudio de la Universidad Anáhuac revela que entre la Ciudad de México y Cancún se dejan de cobrar anualmente hasta 20 mil millones de pesos por concepto de Impuesto sobre la Renta (ISR) e Impuesto al Valor Agregado (IVA), entre las más de 40 mil habitaciones o casas que operan en esta modalidad en ambos territorios.
Según las estimaciones de la asociación, hay más de 15 mil casas rentándose actualmente en esta modalidad en Cancún y un número similar en Solidaridad, Playa del Carmen, en Airbnb y HomeAway, así como otras plataformas similares, lo cual explica en cierta medida el hecho de que mensualmente el Aeropuerto Internacional de Cancún reporta incremento en el volumen de pasajeros que arriba al Caribe mexicano, pero dicho volumen no se ve reflejado en la ocupación hotelera de ambos destinos.
Ello significa que cada vez más un número creciente de turistas está optando por estas nuevas opciones de hospedaje, que ocupan la oferta de asientos de avión, pero no dejan la derrama que un turista tradicional sí deja al destino, aseguró.