Por Olivia Vázquez
Mientras hoteleros de Cancún afinan sus estrategias jurídicas para evitar el pago del derecho de saneamiento que fue impulsado en el Congreso del Estado como un nuevo gravamen para el turista que estará ocupando noches de habitación, el empresariado en general considera que el próximo año será complicado derivado de la expectativa que se está dando por los cambios en la administración. Esta condición se reconoce está generando un freno en la inversión.
Inna Germán, presidente del Consejo Coordinador Empresarial del Caribe, refirió que este 2018 se logró un crecimiento económico en la mayoría de las empresas, sin embargo, para el próximo año “estamos expectantes. Todos tenemos dudas, va a haber movimientos. Estamos esperando a ver qué pasa. Si vemos que hay algunos desarrollos que están deteniendo inversión y cuando se detiene viene una desaceleración, que no se ve de inmediato, se ve paulatinamente, pero es indudable que va a incrementar la inflación, no hay duda de eso”, expresó.
Los cambios se están dando y ya se tienen incrementos en luz, gasolina y por tanto se tendrá que enfrentar una inflación mayor entre dos puntos porcentuales que obligan a incrementar los presupuestos anuales.
“La inflación no es necesariamente algo negativo, pues puede generar un desarrollo económico pero depende de los factores que se establezcan alrededor y ahora no percibo que se estén preparando estos factores, entonces sí puede llegar a una baja de inversión. La credibilidad con respecto a la situación gubernamental en México todavía es muy incierta y no tenemos panorama de seguimiento”, dijo.
Respecto al freno a la inversión, refirió que al menos ya conocen dos desarrollos inmobiliarios que pensaban comenzar a inicios del 2019 y que ahora retrasan la proyección, por lo menos hasta después del primer trimestre del próximo año.
Es que reconoció que el tema del aeropuerto, sigue dando mucho qué pensar y esto no está siendo favorable aunque refirió que el nivel de riesgo no es alto, sin embargo, se requiere conocer las reglas del juego para diluir esta incertidumbre y ese freno a la inversión.
El incremento de impuestos, se sabe, también ha sido uno de los factores que trae de cabeza al sector productivo del estado, y es que aunque se tenía previsto y comprometido que no habrían mayores gravámenes, en el caso de Cancún la aprobación del derecho de saneamiento mantiene a la hotelería inconforme y harta de que todo se tenga que resolver hoy en día por la vía legal y no del diálogo y acuerdo.
Este sector, había solicitado que se realizara un fideicomiso para el manejo de estos recursos y un análisis real de la conveniencia de cargarle al turista nuevamente un cobro adicional, sin embargo, el freno que se logró en el Cabildo se perdió en el Congreso del Estado, donde fue aprobada la iniciativa que obligará a turistas a pagar de 20 y hasta 250 pesos adicionales a su gasto de la noche a la mañana, lo que consideran un revés para incentivar el flujo de visitantes. Sobre todo, consideran que no se puede dar un impuesto sin garantía de transparencia en su aplicación.