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Quintana Roo

Por Olivia Vázquez

No obstante la hotelería organizada en el Caribe Mexicano acelera la reservación para lo que será el cierre de año y la temporada de invierno, el crecimiento en los porcentajes de ocupación cerrará con un descenso de dos o tres puntos porcentuales por debajo de los indicadores obtenidos el año anterior. En contraparte, plataformas digitales que agrupan el hospedaje residencial reportan crecimientos del 20 y hasta el 30% año con año, con un ritmo de ocupación cada vez más favorable. En ello, plataformas de hospedaje como Airbnb destacan que cada segundo seis huéspedes hacen sus check-ins en una habitación residencial en todo el mundo.

Esta plataforma rompió récords de ocupación el pasado 10 de agosto cuando más de cuatro millones de personas pasaron la noche en un alojamiento disponible por la tecnología.

La renta de espacios temporales que se ha generado en ese movimiento mundial, ya atrae a más del 10% del flujo turístico que llega al Caribe Mexicano y que busca conocer la región de otra forma.

Estadísticas de la Secretaría de Turismo Estatal estiman al menos 41 mil cuartos residenciales que operan en todo el Caribe Mexicano bajo este sistema de hospedaje que se genera en el mundo.

Para Cancún, específicamente se habla de casi cinco mil habitaciones y 350 experiencias que se están ofreciendo a los viajeros por este sistema libre de viaje que deja una derrama económica directa en la comunidad del destino.

A nivel mundial, se mantiene ritmos de hasta 30% en este tipo de hospedaje que cada día se vuelve más personalizado y más amplio, mientras que la hotelería en regiones como el Caribe Mexicano cada día también se ve obligada a volverse más creativa para seguir conservando su ocupación y explorar nuevos mercados.

Hoy en día, operadores de estas plataformas reconocen que la línea entre un hotel convencional y una habitación residencial es más corta y al menos en el caso del Caribe Mexicano ocho grandes cadenas hoteleras han ingresado para explorar el mercado, adquiriendo carteras de plataformas digitales que cubren sus estándares de calidad para ofrecer un tipo de habitación diferente de algún anfitrión que opera en el destino, lo que dinamiza el mercado y lo vuelve más amplio y con mayor posibilidad, sin perder la marca hotelera ni la experiencia del visitante.

Según reportes de algunas de las operadoras más fuertes del mundo, plataformas como Airbnb revelan que gran parte su crecimiento acelerado se está produciendo en destinos emergentes donde se ofrece otro tipo de oportunidad y aunque no se tienen datos precisos de muchos indicadores, sí se sabe que hay experiencias que ofrecen anfitriones que están impulsando la generación de conexiones y destinos.

Airbnb reportó este año 26 mil conexiones en el mundo, donde cada conexión que se genera por primera vez entre un turista y una ciudad se van contabilizando.

En México, Airbnb cuenta con más de 8,000 anfitriones, y en el 2019 más de tres y medio millones de viajeros se hospedaron con Airbnb en México y la oferta de alojamientos en el mercado asciende a más de 7 millones de espacios únicos para hospedarse en cerca de 100,000 ciudades y 191 países y regiones con más de 40,000 experiencias.

En ese sentido, se destaca que cada segundo seis huéspedes hacen sus check-ins en un Airbnb y cada día genera ocho nuevas conexiones, el pasado 10 de agosto de 2019, más de cuatro millones de personas pasaron la noche en un alojamiento anunciado en Airbnb.

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