Quintana Roo

Por Salvador Canto

La plataforma de hospedaje digital Airbnb, a través de la gerencia de Políticas Públicas en México, se mostró a favor de la regulación que pretende el Gobierno del Estado y los municipios de Quintana Roo a corto y mediano plazo, al exponer que sería una manera de que las personas se puedan sumar a este tipo de servicio que genera muchos beneficios a cientos de familias.

Dentro de la propuesta de paquete económico de Quintana Roo para el Ejercicio Fiscal 2020 enviado por el gobierno estatal, se propuso una reforma a la Ley del Impuesto al Hospedaje, en la que se disponen nuevas obligaciones para los prestadores del servicio de alojamiento y para los intermediarios.

Dentro de esta, se encuentra que los anfitriones deberán inscribirse en el Registro Estatal de Contribuyentes y obtener una Licencia de Funcionamiento por cada uno de los establecimientos en donde se brinde el servicio de hospedaje.

Para el caso de los intermediarios, es decir las plataformas, deberán inscribirse en el Registro Estatal de Contribuyentes y obtener una Licencia de Funcionamiento con el carácter de retenedor.

Al respecto, Jorge Balderrama, gerente de Políticas Públicas de Airbnb México, afirmó que “Airbnb es la única plataforma que ha colaborado con el estado de Quintana Roo desde el año 2017 para retener el impuesto en nombre de nuestra comunidad de anfitriones, lo cual se ha replicado en otros siete estados de la República, y seguiremos colaborando con el Estado para contribuir en su desarrollo.”

En lo que respecta al registro de los anfitriones, Balderrama dijo que “Airbnb está a favor de la regulación del sector de las rentas de corto plazo a través de requisitos que reconozcan y se adapten a las características de la actividad, basados en el principio de equidad.

Consideró que diseñar una regulación alejada de estos principios atenta contra un desarrollo turístico innovador que recoge las preferencias de los viajeros, pero sobre todo, podría llegar a afectar el empoderamiento de la ciudadanía y la democratización del turismo”.

“Airbnb está a favor de la regulación del sector de alojamientos de corto plazo a través de requisitos que reconozcan y se adapten a las características de la actividad, basados en el principio de equidad. Diseñar una regulación alejada de estos principios atenta contra un desarrollo turístico innovador que recoja las preferencias de los viajeros, pero sobre todo, podría afectar el empoderamiento de la ciudadanía y la democratización del turismo”, expresó.

Finalmente, en lo que respecta a los usuarios, dijo que los beneficiados por la renta de sus espacios son ciudadanos que buscan un ingreso extra, ya sea para complementar su pensión o seguir activos.

Un ejemplo -dijo-, son las mujeres, las personas mayores de 60 años y los profesores, quienes representan 9, 11 y 52 por ciento de los anfitriones de Airbnb en Quintana Roo, respectivamente.