Síguenos

Última hora

Xolos da la sorpresa del torneo; le pega al líder Cruz Azul y pone un pie en semifinales

Quintana Roo

Nochebuena es una noche como cualquier para muchos

 

Por Francisco Javier Díaz Medina

 

COZUMEL, 22 de diciembre.- No para todas las familias existe una Navidad esperada, y más para familias humildes que sólo logran cenar a veces algunos sándwich, reflejadas en ellas la pobreza extrema y la ausencia de sus seres queridos. Para la familia Chim Chim, hace muchos años que la Nochebuena pasó a ser una noche como cualquier otra, sin cena especial, sin pinito ni adornos, sin regalos y ropa nueva.

Este domingo, la señora María de la Cruz Chim Chim, de 56 años de edad, con domicilio en una de las calles del asentamiento, sudando por la jornada de trabajo, luego que en ese momento estaba en Las Fincas, con la piel bronceada producido por los rayos solares, lavando ropa ajena para tener el ingreso de algún recurso económico, y tener para la comida del día.

Al ser entrevistada respecto a estas fechas navideñas, cuando muchas familias viven la alegría de recibir a sus familias para compartir la cena navideña, expresó, “señor, hace mucho tiempo, bueno muchos años que la Nochebuena pasó a ser una noche como cualquiera, sin cena, pues a veces no hay para comer una rica carne asada, y si no hay para la cena, menos hay para un pinito con sus adornos, sin regalos y ropa nueva, ya se me olvidó que es un regalo, tengo que salir a trabajar con mi hermana Isabel, para que en las casas podamos limpiar y lavar ropa, sino, no podremos tener para la comida del día, y la verdad no sabemos si tendremos para la cena en esta Navidad, aunque podría ser un par de pollos de los que crío y pueda sacrificar para hacer un caldito o algunos sándwich”.

Con la mirada triste, y tras guardar silencio unos segundos, expresó que no para todas las familias hay Navidad como las que se esperan, y menos para ellos al ser muy humildes, luego que dijo que recuerda que en los años pasados lograban cenar algunos sándwich en reunión con su hermanita y sobrinas, ya que es demasiada la pobreza en la que viven, “esta será la Navidad más triste que pasaremos todos nosotros, hace tres meses falleció mi papá Alejandro, quien desde hace 44 años fue mamá y papá para nosotros, tenía yo 12 años cuando falleció mi mamá allá en mi pueblo en el estado de Yucatán, y luego de llegar a Cozumel él nos atendía con la comida, tenía que ir a trabajar de albañil y cuando regresaba tarde nos traía la cena y nos dejaba para la comida del otro día, pero nunca nos celebró una Navidad, nunca llegó Santa y ni los Reyes Magos a nuestra casa, creo que no la visitaba porque es de palos y antes tenía techo de palmera”, expresó con una leve sonrisa.

Asimismo comentó que la nostalgia llega más en estas fechas y más se contagia con la música y olores navideños de las casas aledañas, y que en este polo negativo se siente más la nostalgia al no estar los seres queridos en estas fechas, “mis sobrinitas están conformes con lo que Dios no da, platicó con ellas de cómo vivíamos antiguamente, nosotros no supimos y menos ahora que es una Navidad verdadera, con platillos y bebidas como las que llegan a tener en sus mesas los que tienen dinero, será que ellos puedan pedirle a Dios en ese momento, que si existiera Santa y los Reyes Magos llegara algo para nosotros los pobres, se da cuenta que en nuestra casa, entra el frío de esta época, y aunque la tengamos protegida por dentro con cartón nos cala el frío”, expresó con mirada triste y con frunces de nostalgia.

Por último dijo, “tenemos que trabajar, y mañana tengo que levantarme muy temprano para ir a las casas como mi hermanita, donde ella también lava ropa y limpia, fíjese que en el camino también recogemos latas, plásticos y otras cosas para venderlas y poder comprar algo de despensa, bueno, aunque sea 100 ó 200 pesos no alcanza, pero podemos tener para los frijolitos, arroz, pastas y huevos, mire acá cocino con leña, ya que no tenemos una estufa, pues sería más caro comprar gas, en estas fechas aprovechamos para vender algunas de las gallinas o gallos, y eso, pues nos sirve para comprar más despensa, pero una Navidad, no creo que tengamos como en años pasados y menos con la ausencia reciente de mi papá.

 

 

 

Siguiente noticia

Mucho turista, pocas ventas