Por Gabriel E. Manzanilla
CHETUMAL, 11 de febrero.- La Comisión para la Juventud y el Deporte del Estado de Quintana Roo (Cojudeq), encabezada por Antonio López Pinzón, se ha convertido en uno de los organismos más opacos y sin rendición de cuentas dentro del gobierno del estado, aunque para este año duplicó su presupuesto asignado y alcanzó 300 millones 150 mil pesos.
Protegido por las diputadas y diputados de la XV Legislatura, Antonio López Pinzón no ha sido llamado a rendir cuentas con motivo de la glosa del primer y segundo informe de gobierno, por lo que la ciudadanía desconoce los alcances, resultados, el plan de trabajo y manejo presupuestal 2017-2018 de la dependencia que encabeza.
A pesar de que el titular de la Cojudeq ha sido señalado en múltiples ocasiones por presunto mal manejo y desvío de los recursos públicos, hasta el momento no se le conoce una investigación seria e imparcial, siendo que la Secretaría de la Contraloría (Secoes) estaba revisando el caso desde el 2017, pero el tema no se ha vuelto a tocar y no se ha informado de avances ni resultados.
Además del proteccionismo por autoridades estatales y el Congreso del Estado, la Cojudeq se ha convertido en uno de los organismos más opacos del gobierno del estado, siendo que su portal de Transparencia contiene información a medias o desactualizada, o simplemente no se encuentra.
Los informes presupuestales, estados financieros, montos destinados a comunicación y publicidad, así como remuneraciones, son sólo algunos de los apartados con información inexistente, incompleta o no actualizada. En algunos casos, la información sólo llega a la primera mitad de 2018.
Pese a conducirse en opacidad y sin rendir cuentas a los quintanarroenses, la Cojudeq recibió en este 2019 un aumento presupuestal de casi 163 millones de pesos, para quedar con un monto asignado de 300 millones 150 mil pesos.
Dicha cantidad duplica el presupuesto recibido por la dependencia en el ejercicio fiscal 2018, cuando obtuvo recursos por el orden de los 137 millones 177 mil pesos, en ese entonces bajo el nombre de Instituto del Deporte y Cultura Física del Estado de Quintana Roo.