Quintana Roo

Por Karina Carrión

 

COZUMEL, 10 de marzo.- El problema del “síndrome blanco” o “mancha blanca” en los corales de la costera oriental, no es un virus que llegó de Miami, más bien es el resultado de la falta de vigilancia de autoridades ambientales para corroborar que hoteles y clubes de playa de la zona sur, dejen de contaminar con sus aguas negras vertidas al mar.

Tal señalamiento surgió por parte de Guadalupe Álvarez Chulim, presidenta del grupo ambiental Cielo, Tierra y Mar (Citymar) en la localidad, consideró que no se debe de olvidar que desde Punta Sur comienzan los diferentes desarrollos comerciales, hoteleros y habitacionales, y la mayoría de estos ha ido echando por años sus aguas negras al mar, ya que no hay una instancia federal que corrobore que estos cumplan como se debe con la eliminación de las aguas negras de manera adecuada, causando entonces dicha afectación, dijo.

La ambientalista agregó que “desde hace varias décadas he sido insistente en que se tenga presencia de personal de una Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en la localidad y no una representación estatal porque esta última no nos sirve de nada. En realidad sólo la federación podría efectuar operativos y accionar como se debería adecuadamente y hoy que tenemos un problema serio con nuestros arrecifes, comienzan a decir que es por un virus que vino de Miami cuando en realidad son otras cosas de aquí mismo –de Cozumel- que está afectando la vida marina”, expresó.

En el mismo sentido, añadió que “las mancha blancas que tienen los arrecifes, no son algo nuevo. Es algo que ya había pasado hace algunos años y que se supo, fue por los derrames de aguas negras en la zona sur, entonces ahora no se vale echarle la culpa a nuestros vecinos de que tenemos problemas cuando nosotros no hemos cuidado lo que tenemos en casa”.

La dirigente del grupo ambiental aseguró que el excremento es veneno para los arrecifes, por lo que consideró que debería de hacerse un operativo real por parte de autoridades ambientales para que corroboren lo que ha estado replicando, pues aseguró que se tendrá una afectación más severa incluso en lo económico, ya que los cuerpos coralinos son el principal atractivo de los millones de turistas que visitan el destino para conocerlos, dijo, por lo que espera que se tomen cartas en el asunto, concluyó.