Por Olivia Vázquez
La temporada vacacional de Semana Santa arrancó con una ocupación hotelera superior al 78 por ciento, en sus indicadores generales, con hoteles de Todo Incluido que ya superan el 80 por ciento, y con una hotelería del Centro de Cancún que ya toca también el 73 por ciento, pero que será la infraestructura hotelera que estará dando los saltos más grandes en la ocupación hasta llegar el próximo fin de semana al 98 y hasta 100 por ciento, en sus operaciones.
Cancún es considerada la ciudad más atractiva para el turismo nacional y en ello, el destino mostrará nuevas atracciones para el visitante como la apertura del parque Xavage, del Grupo Xcaret, que vendrá a reforzar la oferta turística del destino para aquel turismo que busca la aventura extrema, además cuenta Cancún con un Museo Subacuático, Xoximilco, tres zonas arqueológicas, el Parque Maya, un Acuario, plazas comerciales, playas públicas, además de un Museo de Historia y otras atracciones que se pueden realizar en Cancún.
La llegada del turismo nacional reactiva prácticamente a todos los sectores productivos y así se refleja conforme se acelera la reservación de última hora en el destino.
El hospedaje se estará reactivando no sólo en la hotelería establecida, sino también en los cuartos y residencias que ofrecen el servicio en la temporada.
De acuerdo a la Asociación de Hoteles de Cancún, los casi 36 mil cuartos hoteleros estarán operando en promedios del 80 por ciento de ocupación con un pico en los días de la Semana Santa, que alcanzarán el 92 y hasta 95 por ciento, en operaciones.
Roberto Cintrón, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, refirió que el principal consumidor será mayormente nacional, pero también se tienen flujos importantes de turismo norteamericano y de América Latina que llegan atraídos por la marca Cancún.
En los comparativos de ocupación, el líder empresarial indicó que el comportamiento en la reservación ha cambiado en los últimos años con un ritmo más lento en la reserva que impide tener un panorama más generalizado de lo que será la temporada, sin embargo, refirió que muchos hoteles y cadenas han hecho la tarea en promoción y en ello, estarán alcanzando niveles de ocupación favorables.
Los factores como el sargazo, la percepción de inseguridad y la falta de un plan de promoción específica, además de la competencia dispareja que cada día se vive y se enfrenta con el otro tipo de hospedaje que se está dando, sin duda le pegan al sector y en ello, se tienen que redoblar esfuerzos en promoción y en estrategias para mantener las habitaciones operando.
Para esta temporada, se sabe que el indicador será positivo y aunque algunos desarrollos han hecho sacrificios en la tarifa hotelera, las operaciones serán positivas para la temporada, pero la mayor preocupación del sector se centra en lo que será el verano y el otoño con el temido septiembre y octubre, pues hasta ahora, las reservaciones no dejan ver un buen indicador y el sector hotelero advierte que se podría enfrentar nuevamente el “Septihambre” y “Octuhambre” que años anteriores si no se corrige la estrategia de promoción tanto del gobierno federal como estatal, cuyo organismo encargado de ello no está tomando la opinión de los que verdaderamente mueven el turismo hacia el destino.