Por Luis Enrique Tuz
RIBERA DEL RÍO HONDO, 1 de abril.- Los incendios forestales se están saliendo de control en los ejidos Carlos A. Madrazo, Juan Sarabia, Ramonal y Pucté, pues se han siniestrado más de 190 hectáreas de caña de azúcar en la ribera del río Hondo.
Los dirigentes de las asociaciones cañeras hicieron un llamado a la Comisión Nacional Forestal (Conafor), Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA), para vigilar las zonas de riesgo, porque se están realizando quemas agropecuarias sin los cuidados necesarios.
En Carlos A. Madrazo y Ramonal se han quemado alrededor de 120 hectáreas de caña, mientras que en Pucté van 35 y en Juan Sarabia 40, lo que propició que se movilizaran los frentes de cosecha para cortar la caña en tiempo y forma para llevarla a la factoría.
Además, se generaron pérdidas económicas por los gastos extra que esto conlleva, pues hay cañas que se quemaron y aún no tienen la madurez necesaria, por lo que estiman que se atrasarán un año más por lo que realizó Comisión Nacional Forestal (Conafor), Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), para revisar zonas vulnerables a incendios forestales.
El presidente de la Asociación Local de Productores de Caña de la CNPR, Benjamín Gutiérrez Reyes, informó que tentativamente estas quemas se originaron en los tiraderos de basura a cielo abierto que existen a lo largo de la ribera del río Hondo, donde las botellas causan el efecto lupa e incendian la basura, que luego pasa a la maleza y finalmente afecta la caña de azúcar.
Algunos incendios pueden ser provocados por cigarrillos, pero otros por la infinidad de basureros a cielo abierto que hay a lo largo de la zona cañera, que se prenden en fuego por las altas temperaturas y, como no hay quien lo apague, éste va consumiendo todo a su paso.
Hizo un llamado a los productores de caña para que extremen precauciones a la hora de las quemas controladas y realizar guardarrayas alrededor de sus parcelas, principalmente las que estén cerca del monte, para evitar que las llamas salten de la zona forestal a la agrícola.
Finalmente, señaló que las autoridades federales, estatales y municipales poco han hecho para controlar estos incendios, pues cada año son los propios productores quienes corren con todos los gastos y tienen que arriesgar sus vidas para sofocar los incendios y evitar que sus parcelas queden siniestradas.
Cabe destacar que en la página oficial de la Conafor se tiene el registro de cero incendios forestales en Quintana Roo, de acuerdo con el corte del 28 de marzo del mes pasado.