Quintana Roo

Desarticulan red de corrupción en el INM

Por Gerardo Reynoso

 

El gobierno federal desarticuló una red de complicidad y corrupción al interior del Instituto Nacional de Migración en Quintana Roo, donde se permitía el acceso directo a colombianos y venezolanos a México, vía principal del destino turístico del país.

Desde el mes de enero pasado, el gobierno federal, a través de las Secretarías de Gobernación y Relaciones Exteriores, observó un sinnúmero de autorizaciones, semana a semana, de ingreso de presuntos turistas provenientes de Sudamérica, particularmente de Colombia y Venezuela.

Este hecho se pudo detectar debido a una investigación iniciada previamente por el Consejo Ciudadano de Seguridad y Justicia, organismo que detectó que grupos de extranjeros, principalmente, centroamericanos y sudamericanos, ingresan al país por zonas turísticas para después trasladarse a la Ciudad de México y cometer robos.

En la investigación hecha por el Consejo, se estableció que los ladrones llegan a destinos como Cancún, donde tras pasar unos días se dirigen a la capital haciéndose pasar como connacionales.

Durante su estancia en la ciudad, que es breve, cometen robos a casa habitación, cuyos botines ascienden a más de 100 mil pesos, principalmente obtienen dinero, ropa de marca y objetos de tecnología.

Una vez que logran cometer una serie de tres o cuatro delitos, los asaltantes vuelven a Cancún y desde ahí toman un vuelo que los lleva a su país, así lo informó de manera oficial el Consejo Ciudadano.

 

La red establecida en el Caribe Mexicano

 

Desde hace más de 40 meses, Cancún se convirtió en la puerta de entrada a venezolanos y colombianos al país. Por semana, se tenían más de 100 solicitudes de entrada ante el Instituto de Migración.

De esas solicitudes, sólo se “rechazaban” únicamente tres y el resto se autorizaba aún sin que se cumplieran las reglas básicas migratorias que solicita México a los turistas, las cuales, son boleto de retorno al país de origen y contar con una reservación hotelera para su estancia en el destino.

Esta situación se daba porque miembros del Instituto de Migración en Cancún se aprovechaban de manera literal del decreto publicado en el 2012 por el que México eliminó la visa para los colombianos, quienes desde entonces visitan ese país por turismo, principalmente, y por trabajo, eventos, estudio o negocios, según las estadísticas de la Secretaría de Relaciones Exteriores.

De acuerdo con fuentes oficiales de la Secretaría de Gobernación consultadas por los diarios Por Esto!, la red cobraba entre mil 500 y 3 mil dólares por dar acceso oficial del Instituto Nacional de Migración, delegación Quintana Roo.

Lo anterior significaba que elementos de la dependencia federal en distintos cargos y rangos dentro del instituto, recibían mes a mes una lista de quienes sí eran autorizados a ingresar al país “sin complicaciones” y bajo el estatus de “turistas”.

Mediante estas listas, colombianos y venezolanos ingresaron al país y se enrolaron en las filas de grupos delictivos.

Aunque el reporte del Consejo Ciudadano de Seguridad y Justicia afirma que muchos de los extranjeros sólo se quedaban en Cancún tres días y viajaban a otras partes del país, la realidad es que muchos de los sudamericanos que entraron mediante la red de influencias del Instituto Nacional de Migración, se quedaron a radicar en el estado, tanto en este municipio como en la Riviera Maya, Tulum e incluso la capital, Chetumal.

Esta situación se confirma con las denuncias y expedientes abiertos por la Fiscalía General del Estado, así como por las afirmaciones de la Secretaría Estatal de Seguridad Pública, del delito de “gota a gota” instalado en Quintana Roo.

Conforme a los reportes policíacos, Quintana Roo se encuentra entre las 13 entidades federativas afectadas por grupos de colombianos que se dedican a llevar a cabo este sistema de extorsión.

Se trata de la mafia colombiana que se instaló en el Caribe mexicano gracias a la red que ha sido desarticulada desde el centro del país por la administración que encabeza Andrés Manuel López Obrador.

 

La desarticulación

 

Desde hace 15 días, 20 funcionarios – aún no se precisan cargos y rangos – fueron despedidos de manera oficial del Instituto Nacional de Migración, delegación Quintana Roo.

Fuentes oficiales de la Secretaría de Gobernación confirmaron a los diarios Por Esto! de las bajas. Entre los motivos principales están los señalamientos de corrupción, por los cuales se abrieron expedientes ante las autoridades competentes.

Asimismo, se puso bajo investigación oficial a todo el personal de Migración que labora en las terminales internacionales del Aeropuerto de Cancún, para determinar si tienen relación con la red.

De la misma manera, se comenzaron a rechazar en promedio hasta 80 solicitudes de ingreso de “turistas” venezolanos y colombianos a Quintana Roo vía este destino turístico.

El Instituto Nacional de Migración, por determinación oficial de la Secretaría de Relaciones Exteriores, endureció por completo las políticas de ingreso al país desde el Caribe mexicano y cualquier punto de la República Mexicana.

Ahora, ya no basta con tener reservación de hotel y boleto de retorno, sino que el Instituto Nacional de Migración ha puesto en marcha el esquema de “análisis” de perfil de ingreso.

Este esquema consiste en determinar si el solicitante en realidad cumple con los estándares de seguridad para el país, ya que también la red de corrupción al interior del Instituto Nacional de Migración permitía el arribo de prostitutas de Colombia, Venezuela y Brasil.