Quintana Roo

Ultramar vuelve a 'mostrar las uñas”

Por Ovidio López

 

ISLA MUJERES, 28 de abril.- Ya comenzó a “mostrar las uñas” nuevamente Ultramar, al requerir credenciales de elector para emitir boletos para residentes. La misma práctica antigua cuando no hay otra alternativa que viajar en sus barcos de ruta, coinciden usuarios locales.

Esto, a unos días de incrementar el 50 por ciento del costo del uso del estacionamiento en su terminal de Gran Puerto, en Puerto Juárez, al pasar de 100 a 150 pesos, por día, sin previo aviso, tal como dimos a conocer en su oportunidad.

Ya ordenó a sus ejecutivos que vuelvan a ser inflexibles sus taquilleras con aquellos que, por alguna razón, olvidaron sus credenciales de identificación, aunque sean usuarios frecuentes y se conozcan. Simplemente, la venta de boletos es individualizada, si no comprueban domicilio pagan como turistas, lo que significa casi el doble a erogar.

Son implacables, prepotentes y llegan a ser racistas. Desean vender casi todos los servicios de recreación en sus terminales, de paseos en lancha, carros de golf y demás entretenimientos, violentando reglamentos.

“El incremento del precio por el uso del estacionamiento fue considerado como abusivo y arbitrario, ya que no solamente era caro el costo anterior, de 100 pesos, sino que ahora es un atraco, ya que subió a 150 pesos por día, y con pago anticipado”, dijo un usuario al aceptar que no tiene más opción por el momento.

Todo esto cuando ya hay rumores de un ajuste del precio de los boletos de ruta, lo que sucedería cuando prácticamente tiene “aniquilado” a su competidor, Naveganto, a quien se le hostiga por primera vez por empleados de la Administración Portuaria Integral de Quintana Roo (Apiqroo), según testigos.

También tienen en la lona a su competidor en la ruta a Punta Sam, Marítima Isla Mujeres, que prácticamente está en quiebra. La sociedad con Marinsa no funcionó. Parece que la suerte se decidirá el próximo 4 de mayo, cuando se celebre la reunión de socios (se aclaró que no estaba prevista para este sábado, como inicialmente lo publicamos), en la que se produciría la ruptura total de esa sociedad que apenas tiene un año.

Ningún ejecutivo de Marinsa da la cara, no contestan llamadas para dar a conocer su postura. Ya se habla de un desajuste para favorecerse, pues tiene el control en la operación, aunque sea minoritario, con las acciones. Todo esto favorece a Ultramar, se volvió “trol” de Ultramar, un Caballo de Troya, en el peor momento de esta compañía, que atiende la ruta desde hace dos décadas.