Por Miguel Améndola
TULUM, 29 de mayo.- Tras 11 años de que Tulum se decretó como el noveno municipio del estado de Quintana Roo, ha tenido hasta más de 400% de incremento poblacional en la cabecera municipal, pero su desarrollo en infraestructura ha sido a pasos acelerados y desordenados, mientras que el crecimiento geográfico y en servicios va a un ritmo no acorde.
En virtud de lo anterior, Gilberto Gómez Mora, uno de los principales promotores de Tulum, evocó cómo en mayo del 2005 se empezaba manejar la posibilidad de que sea un municipio más de la entidad quintanarroense.
De esa manera, explicó que se necesitaban cumplir requisitos con determinado número de habitantes para iniciar este proceso, pero de acuerdo a un censo del Consejo Estatal de Población (Coespo) indicaba que el número poblacional aumentaría para cumplir con los parámetros.
De ese modo, para el año 2008 en toda la geografía de Tulum ya se contaba con más de 30 mil pobladores, de los cuales más de 15 mil habitaban la cabecera municipal, por lo que iniciaron las gestiones a esta propuesta de municipalización.
Posteriormente, contó que el anhelo para que Tulum sea municipio se logró a base de luchas y propuestas que al final se publica en el periódico oficial del estado el 19 de mayo la creación de Tulum como el noveno municipio, para que a su vez a los 10 días, para que un 29 de mayo del 2008 se hiciera válido el decreto 07 y 08, y así tras otros 10 días de haberse programado municipio nacía el primer consejo que encabezó el que ahora es el actual presidente municipal Víctor Mas Tah.
Aunado a ello, dio a conocer que actualmente se estima que Tulum cuenta con más de 72 mil habitantes entre todas sus comunidades de la zona de transición, maya y demás demarcaciones costeras, mientras tan sólo en la cabecera hay más de 40 mil pobladores.
Por su lado, Javier Flores Flores, presidente de la Asociación de Profesionistas y miembro del Colegio de Ingenieros Civiles y Arquitectos en Tulum, opinó que ha percibido un desarrollo en el plan natural y pensando que se ha partido de los reglamentos de otros municipios con más años de desarrollo.
“Acabamos de nacer, 11 años no es edad suficiente para tener autonomía basadas de las experiencias de otros municipios, para poder manejar un desarrollo sustentables y de acuerdo a nuestras propias leyes”, dijo.
No obstante, apuntó que desde su visión se toman decisiones y se permiten construcciones en una “tierra sin ley”, por lo que es difícil imponer una ley y se está encima sobre el compromiso que se aceptó cuando nos convertimos en municipio, que implícitamente se aceptó pero que no se debe soslayar reglamentos que sirvan para un desarrollo armónico.
“Estamos en un momento de emparejar los desarrollos de nuestras propias leyes para tener desarrollo sustentable y armónico, debemos de estar luchando para que el crecimiento sea aparejado con la innovación y adicionando las condiciones de nuestro propios reglamentos”, acotó.