Síguenos

Volver

ÚLTIMA HORA

México

INE oficializa la pérdida de registro como partido político para el PRD

Volver

Quintana Roo

Por Gabriel E. Manzanilla

CHETUMAL, 2 de julio.- Galleros de todo el estado y personas dedicadas a las actividades taurinas de los once municipios, junto con representantes de comunidades de la Zona Maya, además de agrupaciones de palqueros y la Asociación de Calesas de Cozumel, así como otros grupos de la Península de Yucatán, realizaron una mega marcha a lo largo de la avenida Héroes y culminaron con una manifestación pacífica ante el Palacio de Gobierno, en rechazo a la Ley de Protección y Bienestar Animal, especialmente por el punto que prohibe las corridas de toros y peleas de gallos en Quintana Roo.

El movimiento juntó a más de un mil personas que iniciaron su recorrido desde el Museo de la Cultura Maya, quienes pedían que se respeten sus tradiciones y costumbres, y que no se atente con miles de fuentes de empleo, y logró detener la promulgación de esta ley, y obtener el compromiso del gobierno del estado y de los diputados de que se revertirán las disposiciones que prohiben sus actividades, lo cual se expone en notas aparte.

A la marcha también se sumó la Asociación de Calesas de Cozumel, participando los concesionarios de los carruajes turísticos de la ínsula, quienes también fueron afectados con la Ley de Protección y Bienestar Animal aprobada por la XV Legislatura, ya que también se prohibe el uso de equinos para las calesas, dándoles un periodo de seis meses para dejar de utilizarlos a partir de que se publique y entre en vigor la referida ley.

Personas de todas las edades marcharon por la emblemática avenida, incluyendo niños, mujeres y adultos mayores, quienes gritaban todo tipo de consignas en contra de la polémica prohibición y de los diputados que la aprobaron; “no a la prohibición, si a las tradiciones”, coreaban a lo largo de la caminata.

Algunas personas iban a pie y otras más a caballo, pidieron ser escuchadas por las autoridades de gobierno, pues aseguraron que se está atentando con sus tradiciones y costumbres, no sólo de un pequeño grupo de personas, sino de miles de familias y comunidades enteras a lo largo y ancho del estado.

Señalaron que también se está destruyendo el sustento de miles de personas, además de muchos empleos directos e indirectos que generan estas actividades, desde aquellos que construyen la plaza de madera para festejar una corrida de toro, un palenque, charreada o jaripeo, así como cualquier otro festejo relacionado; hasta aquellos que crian al ganado y a los llamados toros de lidia, pasando por los veterinarios, los chicharroneros, los palqueros, los criadores y entrenadores de caballos, empresas dedicadas a la venta del alimento y artículos de tauromaquia, los novilleros y hasta vendedores ambulantes, así como comunidades enteras que año con año realizan sus ferias de pueblo y tienen muy arraigadas estas actividades populares.

También se afecta a los criadores de aves de corral, a las empresas que fabrican sus jaulas, a los que producen y venden el alimento; así como a los artesanos que elaboran el equipo empleado en las corridas de toros y peleas de gallos, desde lazos, monturas, ropa, calzado, entre otros artículos.

A manera de ejemplo, los manifestantes indicaron que en el estado existen actualmente unos 500 mil gallos de pelea, todos ellos requieren de una crianza y alimento especial, lo que también beneficia a veterinarios y a los productores y vendedores de su comida, “al desaparecer los gallos de pelea también se acaba el trabajo de la gente que los criaba, que los cuidaba y que les proporcionaba alimento; pero no sólo eso, también hay que ver lo que pasará con estos animales, tendrán que ser sacrificados porque no pueden dejarse al aire libre, su naturaleza es violenta, son muy territoriales y se pelean con otros animales y hasta con personas”, explicaron.

Dijeron que también pierden los gobiernos municipales, porque para hacer estas actividades se requiere pagar los permisos correspondientes, además de que periódicamente deben actualizar y tener sus papeles en regla, lo que representa una importante contribución para las arcas municipales.

Exhibieron una manta con la foto de la diputada panista Eugenia Solís Salazar, principal promotora de la Ley de Protección y Bienestar Animal, a quien acusaron de traidora y de atentar contra más de 20 mil fuentes de empleo, al tomar una decisión irresponsable e inconstitucional porque prohibió estas actividades populares, pero sin ofrecer otras alternativas económicas.

En otra manta exhibieron al resto de diputados que aprobaron la polémica prohibición, a todos ellos reclamaron por querer acabar con las pocas fuentes de empleo que hay en Quintana Roo, sobre todo en las comunidades más marginadas de la Zona Maya, que no sólo tienen estas actividades como una tradición, sino también les dejan para comer y así sobrevivir, al no tener mayores oportunidades y sufrir el abandono de sus tres niveles de gobierno.

“Los diputados están muy preocupados por atender una ley aprobada de forma irresponsable y que atenta contra miles de familias y fuentes de empleo, pero no hacen nada por solucionar el problema de inseguridad, de sargazo, de desempleo, de abandono de las comunidades y de la zona sur, no hacen nada por esos y otros temas que son más importantes”, refirieron los manifestantes.

De hecho, en un punto de la marcha dijeron que esto da la impresión de ser una “cortina de humo” para que la sociedad se olvide del mal trabajo de los diputados y de los más de 140 millones de pesos, que supuestamente se robaron en “ayudas sociales”, los cuales no han querido transparentar ni rendir cuentas a la ciudadanía.

Los representantes y dignatarios mayas dirigieron unas palabras en lengua maya, hablaron por sus comunidades y defendieron estas actividades populares, las cuales están muy arraigadas y se hacen año con año en todos los pueblos mayas de la Península de Yucatán, “en lugar de legislar en contra de nuestros pueblos y en contra de nuestras familias, los diputados deben hacer leyes que nos traigan empleo y mejoren las cosas en nuestras comunidades”, dijeron los dignatarios mayas.

Participaron grupos y comunidades de todo el estado, también se unieron de Campeche y Yucatán, entre estos el Grupo Taurino Tendido Tapia, la Unión Mexicana de Picadores y Banderilleros, la Sección Nacional de Criadores de Aves de Combate, la Unión Nacional de Avicultores, Comisión Mexicana de Promoción Gallística, Tauromaquia Mexicana, Asociación Nacional de Matadores de Toros y Novillos, Rejoneadores y Similares; Galleros de la Zona Maya, la Asociación de Palqueros de José María Morelos y la asociación civil Calesas de Cozumel.

También se hicieron presentes las comunidades El Cedral, Santa Gertrudis, así como distintas poblacionesy hasta dignatarios de la Zona Maya.

Se unieron agrupaciones de criadores de caballos, empresas dedicadas a la tauromaquia, así como una empresa dedicada a la venta y distribución de alimentos para aves de corral, entre otros grupos.

La marcha culminó en Palacio de Gobierno, donde hicieron un breve performance con caballos, toreros y novilleros. También recabaron firmas de todos los asistentes, pues aseguraron que, en caso de ser necesario, enviarán un documento al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, a quien le pedirán ayuda para que sean respetados sus usos y costumbres.

Una comitiva fue atendida por el subsecretario de Desarrollo Político del gobierno del estado, Arturo Contreras Castillo, con quien se hizo el compromiso de que la Ley de Protección y Bienestar Animal ya no será publicada en el Periódico Oficial del Estado, sino que primero será revisada y modificada.

Posteriormente, los representantes galleros, taurinos, de las comunidades mayas y las Calesas de Cozumel se dirigieron al Congreso del Estado, donde sostuvieron una reunión y también tomaron acuerdos con algunos diputados.

 

SIGUIENTE NOTICIA

Quintana Roo

Vetarán ley en discordia.