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Quintana Roo

De la Redacción

CHETUMAL, 14 de agosto.- La intensa actividad del narcotráfico en la zona sur de Quintana Roo quedó evidenciada de nueva cuenta con las operaciones continuas de aeronaves con cargamentos cotizados en miles de dólares.

Las jugosas ganancias que se obtienen de esta actividad les permite a los narcotraficantes darse el gusto de hasta quemar las aeronaves o tratar de enterrarlas una vez que reciben los cargamentos.

Esta actividad se incrementó en la zona sur de Quintana Roo desde el año pasado, cuando las Fuerzas Armadas empezaron a detectar por radar el sobrevuelo de avionetas, que mediante operativos han logrado decomisar con parte de los cargamentos.

Las personas que se dedican a esta actividad cuentan con los recursos y equipos suficientes para construir pistas clandestinas en periodos cortos de tiempo, ya sea en los lechos lagunares secos o en zonas agrícolas encubiertas como caminos sacacosechas.

Además de que cuentan con personal para tumbar monte, contratan ingenieros para preparar el suelo con maquinaria pesada, la cual utilizan en el acarreo del material y también en la compactación del terreno con el objetivo de que las aeronaves puedan aterrizar.

También tienen un amplio conocimiento del territorio en que se movilizan, porque una vez que les detectan alguna, a los pocos días ya tienen otra pista clandestina con las condiciones adecuadas para bajar los aviones.

Los aterrizajes recientes se han registrado desde el narco-triángulo de operaciones que comprende las localidades Miguel Alemán, Río Verde y El Gallito, en el municipio de Bacalar, hasta el ejido El Ramonal, donde el pasado 13 de agosto hallaron otra narcoavioneta quemada de manera intencional; así como en la laguna La Valeriana, en los límites de Quintana Roo con el estado de Campeche, en donde se han descargado toneladas de droga, y de las cuales una menor parte ha sido decomisada por las Fuerzas Armadas.

Cabe destacar que el reciente aterrizaje de una narcoavioneta fue en la zona agrícola conocida como Las Quinientas, en el ejido El Ramonal, en la ribera del río Hondo, cerca de la frontera con Belice, donde elementos de las Fuerzas Armadas localizaron, el pasado martes, una aeronave bimotor quemada de manera intencional, en una pista clandestina de reciente construcción.

Ante la vigilancia que realizan las Fuerzas Armadas en el conocido narco-triángulo de operaciones, conformado por las comunidades Miguel Alemán, Río Verde y El Gallito, en el municipio de Bacalar, miembros del narcotráfico internacional procedente de Sudamérica reactivaron la narco-ruta de la ribera del río Hondo.

La narcopista encontrada queda a 16 kilómetros y medio de Ramonal, población que se encuentra en la ribera del río Hondo en la frontera México-Belice, y tiene un kilómetro 370 metros de longitud.

El pasado 29 de julio, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) confirmó el aseguramiento de un narcoavión en las cercanías de Miguel Alemán y Río Verde, así como del decomiso de una gran cantidad de cocaína y de armas largas y cortas en la localidad El Gallito, todas del municipio de Bacalar, donde implementaron un cerco de seguridad con personal militar.

Ese mismo día, agentes de la Fiscalía General de la República (FGR) llevaron a cabo el aseguramiento de la aeronave, la cual los delincuentes intentaron enterrar en un costado de la narcopista donde descendió.

Asimismo, la FGR realizó indagatorias en los poblados de Miguel Alemán y Río Verde, zona ubicada en los límites de Quintana Roo con el estado de Campeche, donde fueron hallados el narcoavión y la gran cantidad de droga, valuada en más de 47 millones de pesos.

Esta zona, principalmente Miguel Alemán, Río Verde y El Gallito, forman el narco-triángulo de operaciones aéreas del narcotráfico internacional procedente de Sudamérica, en una ruta de vuelos ilícitos que entran a territorio mexicano por la frontera con Belice y se extiende hasta los territorios colindantes en los límites entre Quintana Roo y el estado de Campeche.

Debido a lo anterior, el personal de la XXV Compañía de Infantería No Encuadrada (25 CINE) permaneció custodiando el rancho sin nombre en las inmediaciones de Miguel Alemán y Río Verde, donde se encuentran aseguradas la narcopista, la aeronave, un bulldozer y una camioneta. El rancho permaneció con la reja de acceso cerrada, pero los soldados permanecieron completamente alertas.

El pasado 27 de junio, un narcoaeródromo fue ubicado en el norte del municipio de Calakmul, estado de Campeche, donde se recibían hasta cuatro vuelos semanales que trasladaban cerca de 2 toneladas de droga provenientes de Colombia y Venezuela, en Sudamérica.

Camuflados en la selva campechana, integrantes del crimen organizado habían consolidado un campamento que operaba una pista de aterrizaje en el lecho seco de la laguna La Valeriana, ubicada a cinco kilómetros lineales del poblado Bel Ha, hacia el oriente.

Este nuevo hallazgo realizado por el Ejército Mexicano revela la importancia de la zona limítrofe entre Campeche y Quintana Roo para recibir cuantiosos cargamentos de droga, actividad que es solapada por las autoridades y corporaciones de los tres niveles de gobierno.

En el lugar se recibían al menos cuatro aeronaves a la semana, cargadas con aproximadamente 2 toneladas de droga. Esta ocasión, una narcoavioneta Cessna fue quemada en el lugar, presuntamente por la cercanía de las Fuerzas Armadas y la premura de los pilotos y sus secuaces por escapar.

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