Por Gabriel Aguilar
COZUMEL, 23 de agosto.- Cozumel se queda sin Fiscalía General de la República (FGR) antes PGR, ni el gobierno municipal, ni el estatal ni el federal apoyaron a la instancia con un recinto, y desde este viernes ya no hay subsede en la isla. Los que quieran denunciar casos de índole federal tienen que viajar hasta Playa del Carmen. Su delegado, Javier Ocampo García, simplemente no tuvo la capacidad de negociar un nuevo edificio o no hubo apoyos.
En un hecho inédito y sin precedentes, Cozumel se quedó este viernes sin oficina representativa de FGR antes PGR, dejando de despachar en el edificio situado sobre la calle 2 Norte con Décima avenida de la colonia Centro, el cual desalojaron al vencerse el plazo para poder seguir ocupándolo.
Casi al mediodía comenzó el desalojo del inmueble, y al tratar de indagar con el personal, simplemente se acogieron a la cerrazón habitual con la prensa, pero era inocultable la entrada y salida de elementos de la Policía Ministerial de FGR, ayudando a sacar todo el archivo con expedientes, hasta que llegó una camioneta de mudanza para transportar los muebles que utilizaban.
La salida de FGR es algo que jamás se había presentado en la isla de Cozumel, primero se debió a la política del gobierno federal de anunciar que no rentarían edificios para albergar oficinas gubernamentales de la Federación, con esa política la subsede de Cozumel dejaría de rentar el inmueble que utilizaban, y aunque el gobierno municipal, supuestamente apoyaría a la FGR con una sede en uno de sus predios, no ocurrió así, o hasta este viernes no sucedió.
En apariencia Javier Ocampo García, delegado de FGR, demostró la falta de capacidad de negociar la permanencia de la subsede con las autoridades locales que siempre hablan de “coordinación con los tres niveles de gobierno”.
Se sabe que la FGR se mudará a Playa del Carmen, donde el personal estará recibiendo las denuncias de la gente de Cozumel, es decir las personas o interesados deberán cruzar hacia el vecino municipio a realizar las diligencias necesarias, obviamente pagando el costo del viaje y los gastos que eso genere, y si hay que darle seguimiento a sus casos al día siguiente o en los subsecuentes, también deberán invertir en ello.
La FGR no recibió hasta ahora el apoyo de ninguna instancia para continuar teniendo la oficina representativa en la localidad, y se ha visto que los delitos del orden federal siguen suscitándose en Cozumel.
Prueba de ello son los hechos en donde salen a relucir armas de fuego, que si se logran detenciones y aseguramiento de arma de este tipo, primero es catalogado como delito del fuero común, luego se le da vista a la FGR por las cuestiones de portación de arma de fuego, que con la reforma constitucional actual, ya se convierte en un delito grave que conduce a prisión preventiva a la persona que tiene en su poder sin permiso legal un arma de fuego de uso exclusivo del Ejército y Fuerzas Armadas.
Otros de los casos que han terminado en la FGR son algunas de las narcomantas que han sido colocadas en algunos puntos de la mancha urbana, y que por el sentido relacionado a algún grupo delictivo, la Fiscalía General del Estado, no las recibe, sino que las remite a esa instancia federal, pero ahora no se tendrá en la isla.
Aunque no solamente manejan delitos de portación ilegal de armas de fuego y/o explosivos, sino ambientales que también suceden en la isla, así como delitos contra la salud, hasta financieros, entre otros.
Hace poco más de 25 años, se tenía a la Procuraduría General de la República (PGR) en la Plaza del Sol del parque Benito Juárez, sin embargo, por quedar en pleno corazón comercial y turístico de la isla, la entonces PGR se mudó de sede instalándose a dos cuadras de las canchas del DIF y de la escuela primaria “Adolfo Escalante”.
Alrededor de dos años atrás, se mudaron hacia la calle 2 Norte con Décima avenida donde les llegó el cambio de nombre a Fiscalía General de la República (FGR).
Con la salida de la FGR de Cozumel, se desconoce cuál será el mecanismo que utilizarán las autoridades de seguridad por si hay detenidos o evidencia que tenga que ser puesta a disposición de esta instancia federal en caso de que ya no haya cruces de barco a esa hora, y quién las pondrá a disposición, al menos que lo dejen al primer respondiente.
Otro de los efectos colaterales, es que la FGR perdió un lugar en la mesa de seguridad en Cozumel, desde este viernes ya no despacha en la isla, y los expedientes fueron enviados a una bodega.