Por Salvador Canto
Pese al recorte presupuestal que limita aún más los apoyos al sector pesquero ribereño, “hombres del mar” de agrupaciones independientes de Puerto Juárez, mantienen su labor contra viento y marea, para poder obtener lo necesario para el sustento diario de sus familias.
Ayer, un grupo de pescadores se preparaba para zarpar rumbo a los campamentos que tienen en la zona de Boca Nueva, para trabajar por lo menos hasta el fin de semana, con la esperanza de retornar con una buena cantidad de productos que puedan comercializar lo más pronto posible.
“El tiempo nos ha permitido trabajar, poco a poco ahí vamos, sin apoyo ni nada porque somos independientes”, comentó uno de los pescadores de Puerto Juárez mientras acomodaba dentro de su embarcación, bolsas con cebollas, tomates, tres rejas de huevos, agua y refrescos que llevan al campamento.
Lamentó que si antes tenían la posibilidad de aspirar a por lo menos, gestionar algún tipo de apoyo para la sustitución de algún motor e incluso embarcación, ahora es completamente complicado.
“Es lamentable que el sector pesquero se vea afectado con el recorte presupuestal, pero esto es atribuido a que hay dirigentes de cooperativas e incluso autoridades que han abusado de los apoyos que jamás llegaron a nosotros”, insistió.
Por ello, agregó que ojalá las autoridades hagan una investigación y revisen realmente quiénes han sido los más beneficiados con los apoyos, porque “a nosotros no nos llegó nada y lo que tenemos, ya sea nuestra lancha y el motor, es porque lo hemos trabajado”.
Finalmente, mencionó que espera trabajar por lo menos hasta el fin de semana y retornar con una buena carga de productos para poder entregar y comercializar para el sustento de la familia.
Por otro lado, en días pasados en Puerto Juárez, la Procuraduría Federal del Medio Ambiente (Profepa) clausuró la gasolinera que está entre el muelle de Ultramar y el camaronero, por carecer de los permisos correspondientes.
Sin embargo, pese a que la suspensión por parte de la autoridad, pescadores señalan que les siguen vendiendo, aunque en pocas cantidades, pero este martes, al ver que se estaban tomando fotos, la gente que trabaja en dicho lugar optó por negarle el producto a un yate que llegó decidido a que le despacharan combustible.