Por Julio Javier Mena
CHETUMAL, 7 de septiembre.- Una treintena de mujeres acompañadas de familiares se manifestaron de manera pacífica en las instalaciones del Hospital Oncológico de Chetumal, el cual aún continúa cerrado.
Las mujeres manifestantes explicaron que necesitan de manera urgente que comience a funcionar el hospital Oncológico de esta ciudad, ya que debido al recorte presupuestal que se ha dado en el sector salud, esta clínica no se ha podido abrir, por lo que aún se tienen que desplazar a las clínicas oncológicas de la ciudad de Campeche o de Mérida, por lo que no están recibiendo el tratamiento de quimioterapias y radioterapias de manera adecuada.
Las manifestantes se dieron cita en el las instalaciones del Hospital Oncológico de Chetumal a las 17:30 horas, dicho nosocomio se encuentra sin funcionar, aparentemente debido al recorte presupuestal que se le asignó a todo el sector salud a nivel nacional.
Las mujeres afectadas llegaron con pancartas de color rosa, las cuales decían: “Necesitamos el Oncológico para vivir”, “Señor Gobernador necesitamos una fecha para que abra el hospital Oncológico”, “el Cáncer no espera”, “tengo cáncer y no hay el medicamento para mi quimioterapia”.
Las mujeres manifestantes argumentaron que no van con fines partidistas o con alguna consigna política, ellas sólo quieren poder salir adelante y vencer esta enfermedad, ya que sin este hospital el tratamiento se les hace cada vez más caro.
Las mujeres afectadas comentaron que hicieron llegar una carta al Presidente de la República, donde le piden su colaboración, ya que se encuentran en una situación de alto riesgo, debido a que no se ha aperturado esta clínica.
“La carta no sólo se la hemos hecho llegar al presidente, también al gobernador y al secretario de salud a nivel nacional, así como al presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos”, las afectadas por el cáncer esperan una respuesta favorable y que no demore, ya que de eso depende su vida.
Esta situación ha afectado sobremanera a las mujeres que padecen cáncer de mama, ya que se les había hecho la promesa de que a más tardar en el mes de marzo este hospital entraría en funciones, pero hasta el momento continúa cerrado.
La situación para estas mujeres es complicada, ya que se tienen que trasladar a los hospitales oncológicos de las ciudades de Campeche o Mérida, donde el gasto del hospedaje corre por su cuenta.
Esto se agrava mucho más, ya que no cuentan con los medicamentos suficientes para atenderlas debido a este recorte, por lo que ya no están tomando las quimioterapias en tiempo y forma, resultando ser sumamente grave para ellas, pues de no recibir este tratamiento como se debe, ellas podían morir en la espera.