Por Eva Murillo
Nivardo Mena Villanueva, presidente municipal de Lázaro Cárdenas, municipio al que pertenece la isla de Holbox, fue enfático al decir que no va a negar licencias de construcción para la Isla Chica si el inversionista tiene el aval de las autoridades ambientales federales, a través de las autorizaciones de Manifestación de Impacto Ambiental (MIA).
A pesar de reconocer la caótica situación que vive la isla en materia de vialidades, y sobre todo en generación, recoja y disposición final de la basura, sostuvo la postura de que detener el desarrollo en terrenos privados no está dentro de sus planes de poner orden en la zona.
“No se puede detener; tenemos que moderar”, dijo, para luego comentar que Isla Chica ya se convirtió en un centro comercial y quienes habitaban ahí han optado por salirse ante la falta de tranquilidad de la zona.
“La Isla Chica ya viene convirtiéndose en un centro comercial. Si yo tengo casa en el centro ya me empiezo a inconformar y me debo salir. Ya no se puede. Ya nos ganó. Los mismos holboxianos (sic) son los que han rentado su casa para negocio. Ya no se puede”, resaltó.
El crecimiento en Holbox es de índole turístico, y así pudo constatarse en un recorrido hacia la zona conocida como Punta Cocos, donde construcciones hoteleras caen en la simulación de estar hechas con materiales de la zona para no romper con la imagen del pueblo y ser sustentables, tal como lo mencionan en sus estudios de impacto ambiental.
En los terrenos en donde hace un par de años había selva, la vegetación ha sido arrasada para poder dar espacio a los hoteles “amables con el medio ambiente”, los cuales ya elevaron a más de mil 500 habitaciones la oferta.
Al hablar del número de licencias de construcción otorgadas en el primer año de su gestión, dijo que “son un montón”, sin especificar cuántas, pero dejando en claro que va a seguir autorizándolas.
“Todo implica que yo dé permiso pero sujetándolo a la MIA. Al final la MIA llega y Semarnat y Profepa tienen que autorizarlo”, detalló Mena Villanueva, para luego abundar en que negar las licencias de construcción ocasionará amparos de los propietarios de los predios, pues la negativa estaría violentando sus derechos.
Lázaro Cárdenas es uno de los municipios con mayor interés de inversiones hoteleras. Tan sólo en el primer trimestre del 2019, seis proyectos fueron sometidos al análisis de las autoridades ambientales federales.
Esos seis desarrollos hoteleros englobaron 102 habitaciones para hospedaje que se sumarían a las mil 409 habitaciones que ya estaban operando en esas fechas en la Isla Chica de Holbox.
En las grandes extensiones en la zona de Punta Cocos, donde está la mayor explosión de desarrollo hotelero, no hay viviendas, pues su cercanía con la zona marina donde puede observarse la luminiscencia y la agregación de flamencos le otorgaron la vocación turística que están explotando inversionistas extranjeros y del norte del país.
En la zona habitacional de Holbox, empezaron a entremezclarse los hostales y hoteles. Los albañiles trabajan a marchas forzadas para levantar las construcciones en el menor tiempo posible, para que la inversión pueda recuperarse cuanto antes.
Y es que en temporada de vacaciones, explicó el presidente municipal, en la isla llegan a estar hasta 10 mil personas por día. Sólo poco más de dos mil son holboxeños, cuatro mil son flotantes, es decir, trabajadores de la industria turística, y el resto son visitantes.
Desde años atrás los habitantes de Holbox han clamado por pausar la construcción de más hoteles, al menos hasta que los servicios básicos operen correctamente y puedan atender la demanda que genera la actividad turística.