Quintana Roo

Aseguran armas y equipo táctico

De la Redacción

NARANJAL PONIENTE, FCP, 29 de enero.- La Guardia Nacional, en el operativo de búsqueda de delincuentes y cocaína en la vía corta a Chetumal-Mérida, aseguró parte del arsenal que los narcotraficantes dejaron tirado en un predio de la comunidad Naranjal Poniente, cuando huían al notar la presencia de los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), luego de participar en el narcoaterrizaje de un jet bimotor tipo Hawker.

En total se decomisaron cinco armas largas, 10 cargadores abastecidos calibre .223 y cinco cargadores más calibre 7.62; siete chalecos balísticos, tres radios de comunicación y tres bolsas tácticas. Sin embargo, ya suman ocho las decomisadas, pues éstas se suman a las tres aseguradas el pasado lunes: dos fusiles de asalto y una ametralladora Barrett calibre 50 milímetros.

Sin embargo, los operativos de la Guardia Nacional continúan en la vía corta Chetumal-Mérida, pues las armas aseguradas es sólo una parte de las que portaban los narcotraficantes el pasado lunes durante el aterrizaje del jet doble turbohélice tipo Hawker en el kilómetro 59+500.

El aseguramiento de las armas largas fue en el kilómetro 68 de la carretera Lázaro Cárdenas-Polyuc, en el entronque de la carretera que conduce a la comunidad Naranjal Poniente, en el municipio de Felipe Carrillo Puerto.

El pasado martes, la Guardia Nacional, a las 20:00 horas, tuvo un reporte anónimo que indicaba que en el entronque de la carretera Lázaro Cárdenas-Polyuc con la carretera estatal, que lleva al poblado Naranjal Poniente, algunas personas observaron en el monte lo que parecían ser chalecos balísticos.

Y debido a que mantienen desde el pasado lunes un extenso operativo a lo largo de la vía corta Chetumal-Mérida, acudieron al sitio mencionado, en el kilómetro 68 del entronque hacia la comunidad Naranjal Poniente, municipio de Felipe Carrillo Puerto.

Los elementos de la Guardia Nacional, al efectuar una primera inspección del lugar, lograron observar varios chalecos balísticos color gris y más adentro de la maleza se localizaron armas largas.

La primera arma larga que encontraron fue una calibre 7.62 por 39 de la marca Romarm/Cugir, matrícula 1A-60402-18R0, con un cargador abastecido con 30 cartuchos útiles.

La segunda arma larga fue una calibre .223, de la marca Windham/Weaporzy, matrícula WW080724, con un cargador abastecido con 30 cartuchos útiles.

La tercera arma larga fue una marca Sota calibre .223, con matrícula 006096, abastecida con un cargador con 29 cartuchos útiles.

La cuarta arma fue una sin marca y sin matrícula calibre .223, abastecida con un cargador con 30 cartuchos útiles.

La quinta arma larga fue una calibre .223 marca Smith & Wesson, matrícula TE83816, abastecida con un cargador con cartuchos útiles.

Así como 10 cargadores abastecidos calibre .223, 5 cargadores calibre 7.62, en el mismo lugar encontraron seis chalecos balísticos color gris, con placas Marca Fx Tactical, y un chaleco táctico color negro.

Dos radios de comunicación marca Kenwood, otro radio de comunicación marca Motorola, una bolsa táctica de color negro, una bolsa táctica de color gris. Así como una bolsa de plástico color negra que contenía en su interior dos lámparas de LED.

Los elementos de la Guardia Nacional, luego del aseguramiento de las armas largas, chalecos tácticos y mochilas, trasladaron parte del arsenal que dejaron abandonados los narcotraficantes a la Subdelegación de la Fiscalía General de la República con sede en Chetumal, Quintana Roo, para entregarlos a las autoridades correspondientes.

No sin antes solicitar el apoyo de la CRP de las estaciones Chetumal y Felipe Carrillo Puerto, para no tener ningún percance en el camino, pues se estima que a lo largo y ancho de la vía corta Chetumal-Mérida se encuentran escondidos entre la selva los narcotraficantes, los cuales están dispuestos a todo.

Finalmente, se denunciaron los hechos ante el agente del Ministerio Público de la Federación con sede en Chetumal, Quintana Roo, para el procedimiento de ley.

Este segmento del arsenal se suma a los tres que decomisó el Ejército Mexicano a los narcotraficantes el pasado lunes, después del enfrentamiento en el kilómetro 15 de la vía corta Chetumal-Mérida, que fue de: dos fusiles de asalto y una ametralladora Barrett calibre 50 milímetros.

Las ochos armas largas, el equipo táctico y los radios de comunicación son una clara muestra de que los narcotraficantes estaban decididos a todo para proteger el cargamento de droga que trajo desde Sudamérica el jet doble turbohélice tipo Hawker, con peso neto de 741 kilos y 970 gramos de clorhidrato de cocaína base.

Tan es así que en el enfrentamiento entre elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) con narcotraficantes, tuvo como saldo un militar muerto, el cabo E. M. R., y tres heridos: el General de Brigada Diplomado de Estado Mayor José Luis Vázquez Araiza, comandante de la XXXIV Zona Militar, y los soldados C. B. H. y L. G. S.

Cabe destacar que después de este importante aseguramiento de armas largas, equipo táctico y radios de comunicación, los elementos de la Guardia Nacional continúan con el operativo en la vía corta Chetumal-Mérida, buscando a los narcotraficantes que huyeron con rumbo a la selva, así como más armamento.