Quintana Roo

Cerco militar a Juan Sarabia

De la Redacción

JUAN SARABIA, OTHÓN P. BLANCO, 30 de enero.- Al menos un centenar de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) mantienen sitiado un rancho en la comunidad Juan Sarabia, debido a su probable relación con los hechos de los pasados días, en los que dos aviones jet cargados de droga aterrizaron en la vía corta Chetumal-Mérida y en la aeropista de Majahual, así como porque presuntamente fue descubierta una narcopista por las fuerzas castrenses.

La comunidad de Juan Sarabia está ubicada a 17 kilómetros al poniente de la capital del estado, tomando la carretera Escárcega–Chetumal, y es a partir de este jueves el objetivo de un fuerte operativo de los elementos adscritos a la XXXIV Zona Militar, como parte del cerco que han puesto por órdenes del alto mando a las actividades de los narcotraficantes que organizan y facilitan narcoaterrizajes en el sur de Quintana Roo.

Habitantes de Juan Sarabia fueron sorprendidos esta mañana por un helicóptero de la Fuerza Aérea que sobrevoló en repetidas ocasiones el poblado con vuelo raso. Momentos después comenzó el arribo de personal del Ejército Mexicano perteneciente al VII Regimiento de Caballería Motorizada adscrito a la XXXIV Zona Militar, cuya base se encuentra en Chetumal.

El personal de la Sedena ha dado grandes golpes a los envíos de droga de los cárteles de la mafia en los últimos días y este jueves parece que lograron asegurar una narcopista y ubicar un rancho vinculado a las operaciones delictivas recientes.

El rancho aparentemente se encuentra a poco más de un kilómetro del poblado, con dirección a una de las vertientes del río Hondo. Dicha corriente de agua culmina en el poblado Ucum, a escasos metros de la carretera federal 186 Escárcega–Chetumal.

Los elementos castrenses se establecieron a la entrada del poblado y por el acceso de la brecha que comunica al acceso al rancho. Los soldados se encuentran estratégicamente posicionados para responder en caso de ser agredidos, por lo que no se permite la circulación o acceso a ninguna persona al lugar.

De la misma forma, todo ciudadano que se acerca al lugar debe identificarse y algunos son revisados con la finalidad de que los soldados se aseguren de que no llevan armas u objetos prohibidos o peligrosos.

Hasta el cierre de la edición no había ninguna información oficial sobre lo acontecido en el sitio.

El blindaje de la zona sur por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional ha repercutido en las rutas aéreas que normalmente utilizaban los carteles del narcotráfico, por lo que su desesperación y la constancia de las autoridades castrenses los ha llevado a cambiar de ruta y como resultado se han tenido dos grandes aseguramientos con personas detenidas.

El pasado lunes 27 de enero, un Jet cargado con droga, aterrizó a la altura del kilómetro 59+500, en el tramo carretero Nuevo Israel–Nueva Loría, municipio de Felipe Carrillo Puerto, cerca de un sitio conocido como Rancho Lagarto, aproximadamente a las 4:00 de la madrugada.

Debido a este suceso, se registró un enfrentamiento entre personal militar y los narcotraficantes, que se dispersaron huyendo por el monte hacia los costados de la carretera, resultó fallecido el cabo E. M. R., del VII Regimiento de Caballería Motorizada, que era chofer del comandante de la XXXIV Zona Militar, General de Brigada DEM, José Luis Vázquez Araiza, a quien un proyectil de arma de fuego le ocasionó una herida en el pie derecho.

Asimismo, en el mismo sitio de la refriega salieron heridos el Cabo C. B. H. por un proyectil de arma de fuego en la espalda, y el soldado L. G. S. del VII Regimiento de Caballería Motorizada, por un balazo en el hombro derecho.

Finalmente, aseguraron a Germán G. C., originario de Quintana Roo, y Benjamín C. R., originario de Jalisco, de la misma forma, quedó a disposición de las autoridades el narco Jet, así como se aseguraron dos camionetas, de las cuales una era una van en la cual se encontraron 26 paquetes de droga, con un peso aproximado de cada paquete de entre 30 y 40 kilos cada uno, así como 3 armas largas.

Dos días después, 29 de enero, un avión Gulfstream Aerospace G-1159, con matrícula N18ZL, color blanco con rayas rojas y azules, el cual era piloteado por Aldo L. M., y Miguel Angel B. V., el primero venezolano y el segundo de nacionalidad boliviana, aterrizó en el aeródromo de Majahual bien cargado, pues en su interior se encontraron 42 paquetes, todos con un peso de aproximadamente 35 kilos, que en total se estima en aproximadamente una y media a dos toneladas de cocaína base, lo cual, se traduce en una pérdida de más de 224 millones 640 mil pesos para los carteles de la droga.

Este vuelo salió de Argentina con dirección a Miami, teniendo en su plan de vuelo hacer una escala en Cozumel supuestamente para cargar combustible, pero antes de enfilar hacia México voló a Bolivia, Perú y Venezuela.

En ambos casos los vuelos han tenido gran apoyo en tierra, puesto que para el caso del jet que bajó en la vía corta se asegura que se vio la movilización de alrededor de 50 camionetas con hombres fuertemente armados, que inclusive prepararon el terreno aledaño a la recta de un mil 200 metros utilizada para el aterrizaje, con el desprendimiento o doblando los letreros viales a los costados del camino.

Asimismo, se presume que los tripulantes de la aeronave que aterrizó en Majahual tuvieron aviso del blindaje que ha reforzado el Ejército Mexicano en los aeropuertos de Quintana Roo debido a las actividades del narco, por lo que decidieron bajar en la aeropista ubicada en la costa sur del estado.