Por Gabriel E. Manzanilla
CHETUMAL, 30 de enero.- El Congreso de “puertas abiertas” se convirtió este día en un Congreso de puertas cerradas, luego de que se prohibiera el acceso que antes era público a los pasillos del recinto legislativo, al parecer por instrucciones de la diputada Reyna Durán Ovando, presidenta de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo).
Los guardias de seguridad impidieron el paso a los medios de comunicación y público en general, argumentando que sólo siguen órdenes de los nuevos “patrones” del Congreso, en este caso de la diputada Reyna Durán Ovando, que es la coordinadora del Morena y presidenta de la Jugocopo en la XVI Legislatura.
Aunque se desconoce si la medida se va a mantener por el resto de la legislatura, este día quedó prohibido el acceso a los pasillos del recinto legislativo, que es donde se ubican los cubículos de los diputados y por donde se ingresa a la Sala de Comisiones “Constituyentes de 1974”.
Para poder ingresar a dicha área sólo podrá hacerse por cita, por autorización directa de la presidenta del Congreso, o con el acompañamiento de algún diputado o de sus asistentes, de lo contrario, las puertas del Congreso permanecerán cerradas.
Con esto el Congreso que se hacía llamar de “puertas abiertas” se ha convertido en un Congreso de puertas cerradas, ya que la ciudadanía no podrá acercarse a sus diputados locales en cada uno de sus respectivos cubículos.
Familias de escasos recursos, madres solteras, estudiantes, deportistas, asociaciones civiles, personas discapacitadas o con alguna enfermedad, entre otros grupos vulnerables, suelen acudir con frecuencia al Congreso del Estado para solicitar el apoyo de los diputados que supuestamente los representan, pero ahora ya no se les permitirá tener contacto con ellos a menos que sea con previa autorización.
Por la tarde circuló la versión de que esta nueva medida supuestamente obedecía a instrucciones de Protección Civil Estatal, pero para justificarla se utilizó un documento añejo de la pasada XV Legislatura, además de que ningún diputado se ha pronunciado al respecto.
Tal parece que a los nuevos diputados les falla la memoria, porque ya se les olvidó que llegaron al Congreso de Quintana Roo gracias a aquellos ciudadanos a quienes ahora les prohiben el acceso.