En este 2020 el Gobierno de Quintana Roo ha contratado créditos bancarios de corto plazo por un mil 637 millones de pesos, de acuerdo con los registros de deuda pública de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan).
Se trata de siete créditos bancarios a corto plazo que han sido contratados de enero a la fecha por diversos montos y mediante diversas instituciones financieras, que muestran un importante aumento de pasivos de la administración pública estatal.
En los primeros meses de la pandemia se tuvo conocimiento de los primeros tres créditos de corto plazo contratados por un monto de 787 millones de pesos.
Sin embargo, la titular de la Sefiplan ha contratado otros cuatro créditos bancarios más por un total de 850 millones de pesos, por lo que el total de los créditos suscritos por el gobierno de Quintana Roo en este 2020 ascienden a la cifra de un mil 637 millones de pesos.
Cabe mencionar que el primero de los créditos contratados fue el 23 de abril ante Banorte por un monto de 212 millones de pesos.
El segundo fue contratado el 22 de mayo con HSBC por un monto de 260 millones de pesos.
Posteriormente, el 24 de junio se contrató otro crédito con Banorte por 315 millones de pesos
Para el mes de julio se contrató otro crédito con Bansí por 250 millones de pesos, y en agosto se adquirió otro más con Banorte por 150 millones de pesos, y el 8 de octubre se contrataron otros 350 millones de pesos con Bansí.
Ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público han sido registrados estos seis créditos bancarios de corto plazo.
No obstante, en la página de la Sefiplan se encuentra el registro de que el pasado 21 de octubre se contrató otro crédito de corto plazo por 100 millones de pesos con Banorte.
Cabe mencionar que un crédito a corto plazo es un tipo de crédito que debe devolverse en un plazo máximo de un año y es un monto independiente de la deuda pública de largo plazo, que en el caso de Quintana Roo actualmente es de 18 mil 949 millones de pesos.
Es importante señalar que el aumento de la deuda de corto plazo es un asunto que presiona las finanzas estatales y que en administraciones estatales anteriores era el preámbulo para aumentar la deuda de largo plazo.
Y es que en las últimas dos administraciones, de Félix González Canto y Roberto Borge Angulo, las deudas bancarias de corto plazo fueron constantemente trasladadas a largo plazo, teniendo como consecuencia el sobreendeudamiento de Quintana Roo que inició la presente administración con una deuda de largo plazo por encima de los 19 mil millones de pesos.
Finalmente, es necesario mencionar que para que la deuda bancaria de corto plazo sea contratada a largo plazo, es necesaria la aprobación del Congreso del Estado.
Por Miguel Ángel Fernández