“Llevamos 29 años montando el nacimiento en Cancún, es una tradición de mi familia de Michoacán, antes lo montábamos en nuestro estacionamiento”, la Parroquia Virgen de San Juan, ubicada sobre avenida Las Torres, cuenta con un nacimiento de artistas mexicanos reconocidos, pertenencias del Ingeniero Rafael Reynoso; alrededor de 89 figuras representan diferentes pasajes bíblicos antes y después del nacimiento del niño Jesús.
El portal de José, María y el niño Jesús, la cabalgata de los Reyes Magos antes de llegar al pesebre, el empadronamiento, anunciamiento del ángel a María, entre otras escenas bíblicas están representadas con figuras de cera, propiedad de Rafael Reynoso, que durante 20 años los ponían en el estacionamiento de su casa cada Navidad, sino hasta que un padre de la Parroquia Virgen de San Juan, los invitó a que éste se instalara en dicho lugar. “Poco a poco ha ido creciendo el nacimiento, pues además son de cera que se han mandado a hacer con escultores de Salamanca y León, Guanajuato”, comentó Rafael Reynoso.
Uno de los artistas detrás de estas esculturas es Juan Carlos Salgado Crespo, maestro ceriescultor Salmantino, con una trayectoria de más de 28 años, reconocido con diferentes precios y reconocimientos a nivel nacional, el junto con otro escultor realizan de cuatro a cinco figuras por año, sin embargo, este año debido a la pandemia mundial de coronavirus la familia Reynoso Loredo, no adquirió nuevas piezas para la representación de este 2020.
Este año, de 260 figuras que se tienen para realizar dicho nacimiento, se instalaron 89, debido a que se redujo el espacio y cambiaron de lugar el montaje, para evitar la aglomeración de las personas cuando asistan a la iglesia, pues se terminó de instalar el día 12 de diciembre, para que el público pudiese observarlo.
Además de las figuras son realizadas por personas mexicanas, cada una tiene su historia, sin embargo, la más antigua que hay dentro de las 89 piezas es un hombre sentado a la orilla del rio metiendo los pies al agua, este, fue realizado con una técnica antigua en 1959 por la familia Vega y Rafael Reynoso, la adquirió hace 20 años.
“Yo la vi y sabía que tenía que estar en el nacimiento, cuando viajaba a Michoacán les llevaba fotos y trataba de persuadirlos para que me lo vendieran, sin embargo, fue sorpresa, ya que de tanto insistir, la familia nos lo regaló” comentó.
Cada pieza tiene un valor de entre los mil 200 hasta los dos mil pesos, según sea el caso, por ejemplo, los Reyes Magos, son los que llevan un poco más de detalles, por los colores, pliegues y joyería representativa, además de que por ser figuras de cera, tienen que tener un mayor cuidado, por lo que al resguardarse, estos no se envuelven y se ponen en cajas que tengan alguna ventilación, ya que tienen que estar en temperatura ambiente o fresca, para que no tengan algún daño, incluso al medio año, se sacan para limpiarse, pues llegan a tener humedad.
CG