Vendedores de Mahahual reclamaron irregularidades del gobierno de Otoniel Segovia Martínez, en el sentido que el director de Zofemat cobra con recibos y obliga a adquirir playeras con logos del Municipio.
Mostraron documentos donde les cobran 700 pesos bimestrales por realizar la venta de artesanías, en recibos que no son oficiales.
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A los vendedores les entregan un recibo por “Factibilidad por concepto de Permiso Provisional para uso de artesanías” en la Zona Federal Marítimo Terrestre ubicada en el malecón Mahahual.
El documento no cuenta con folio, no tiene el logotipo de la actual administración y tampoco el nombre del director que la expide, siendo que en este caso el titular de la Zofemat es Oscar Hernández Beltrán.
Los vendedores además de exponer esta irregularidad manifiestan que al atrasarse el director de Zofemat les cobra un recargo de 100 pesos, lo cual está fuera de toda norma y pone en evidencia actos que podrían considerarse delictuosos.
Y además de ello les están obligando a los vendedores a adquirir dos playeras con el logotipo en grande del Ayuntamiento de Othón P. Blanco en la parte posterior y en la parte frontal tienen el logo de la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat).
Con ello se suman más anomalías en este caso, entre ellas el uso de los logotipos oficiales del gobierno municipal, sin que de eso tengan conocimiento autoridades del Cabildo, ni personal de Ingresos.
Asimismo, otra irregularidad es que se le condiciona le otorguen permisos para seguir laborando con la adquisición de las playeras, que tienen que ser solo adquiridas con el titular de Zofemat, a razón de 700 pesos por el par.
Los quejosos también refirieron que las playeras que les vende, es a precios mayores del real por lo que consideran puede ser un negocio personal del titular de Zofemat.
Por ello, esperan que la Contraloría Municipal inicie una investigación por oficio ante los elementos que muestran de presuntos actos de corrupción de un gobierno municipal que supuestamente representa la cuarta transformación del país.
Por Miguel Ángel Fernández