Quintana Roo

De la Redacción

 

PLAYA DEL CARMEN, SOLIDARIDAD, 21 de febrero.- En medio de la imparable narco-violencia que flagela esta ciudad, un comando de sicarios que se transportaban en un vehículo y una motocicleta, intentaron ejecutar a un automovilista en el fraccionamiento Misión del Carmen, quien salvó la vida milagrosamente, porque de tres impactos de bala recibidos en el panorámico, uno rozó el lado izquierdo de su cuello y un disparo en la portezuela hirió su pierna, por lo que, después de ser atendido con los primeros auxilios por los paramédicos de la Cruz Roja, fue llevado al Hospital General de la zona número 18, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Alrededor de las 6:30 horas de este viernes, fue reportado al número de emergencias 911, el ataque a balazos hacia al conductor de un automóvil marca Ford, color rojo, en las confluencias de las calles Misión del Molino y Misión de las Fuentes en el fraccionamiento Misión del Carmen, agresión cometida ante la presencia de menores de edad que salían de sus hogares hacia sus centros escolares, y ciudadanos que se dirigían a su trabajo, quienes por fortuna, no resultaron lesionados con alguna bala perdida.

Mario Alexander B. P., de 32 años de edad, originario del estado de Veracruz, salió de su domicilio y abordó su automóvil marca Ford, color rojo, siendo atacado por sicarios que se transportaban en una motocicleta negra y un vehículo blanco, desde donde realizaron los cuatro disparos, de los cuales, tres impactaron en el panorámico y uno en la portezuela del copiloto, de los tres, uno pegó en el lado izquierdo de su cuello y dos más en la pierna izquierda.

El lesionado fue atendido por paramédicos de la Cruz Roja y trasladado al Hospital General de la zona número 18 del IMSS, para su atención médica, quien salvó la vida milagrosamente porque de acuerdo a los orificios de los tres impactos de bala en el panorámico del automóvil Ford, los gatilleros tenían la encomienda de ejecutarlo.

Finalmente, la Policía Municipal acordonó la escena del crimen para que las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) realicen las diligencias de recolección de evidencias para tratar de dar con los responsables del intento de ejecución, aunque usualmente estos casos terminan en el archivo muerto al igual que las ejecuciones consumadas.