De la Redacción
CHETUMAL, 21 de febrero.- El traslado del narcojet que se encontraba asegurado en la carretera de la vía corta Chetumal-Mérida hacia el aeródromo de la comunidad Majahual, hace que en esta pista se concentren las dos investigaciones de las aeronaves aseguradas el día 27 y 28 de enero.
La cantidad de droga que estas aeronaves transportaban fue de dos mil kilogramos de cocaína en conjunto, pero con el Sistema de Detección de Naves Irregulares que ha montado el personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), se ha logrado frenar el arribo de este tipo de aeronaves en el estado.
Hasta el momento las investigaciones del narcojet que fue trasladado al aeródromo de Majahual se encuentran relacionadas con las pesquisas que se realizaron con la aeronave Gulfstream Aerospace, que aterrizó en esta misma pista, y que fue trasladada al centro del país, por lo que ambas investigaciones se encuentran activas y en proceso.
Esto demuestra que los cárteles de droga internacionales usan la ruta del Caribe volando narcojets desde distintos puntos de Sudamérica que tienen como destino la Península de Yucatán, para proseguir su camino hacia los Estados Unidos.
Esta actividad se había incrementado el año pasado, teniendo un gran número de aterrizajes irregulares de avionetas; sin embargo, con la implementación del Sistema de Detección de Aeronaves Irregulares se pudo frenar las constantes llegadas de estos narcojets a suelo mexicano.
Se espera que este tipo de acciones sigan teniendo resultados positivos, pues la ruta del Caribe es una de las más usadas para hacer llegar la droga al mercado norteamericano.
Como se recordará, el día de ayer 20 de febrero, bajo un fuerte dispositivo de seguridad encabezado por personal del VII Regimiento de Caballería Motorizada adscrito a la XXXIV Zona Militar, fue trasladado el narcojet que se encontraba asegurado en la carretera de la vía corta Chetumal-Mérida, en las cercanías del poblado Nuevo Israel, municipio de Felipe Carrillo Puerto, desde el pasado 27 de enero, cuando descendió en la vía de rodamiento con un cargamento de cocaína.
Los trabajos de los elementos del Ejército para mover la aeronave y llevarla al aeródromo de Majahual iniciaron alrededor de las 15:00 horas, cuando personal de la Fiscalía General de la República (FGR), Fuerza Aérea Mexicana y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) arribaron al kilómetro 59+500 de la carretera federal Polyuc-Pedro Antonio Santos, conocida como la vía corta Chetumal-Mérida.
En el lugar rápidamente comenzaron a desmantelar parte del motor y las alas del avión bimotor modelo Hawker, con matrícula N2204, aparentemente sobrepuesta, utilizado el día 27 de enero pasado para transportar varios kilogramos de cocaína base, que fue asegurado en el sitio donde aterrizó.
Tras un par de horas, los efectivos de las Fuerzas Armadas lograron desprender ambas alas y subieron el fuselaje con los motores a una unidad de la empresa Grúas de Quintana Roo; en tanto, el resto de la aeronave, es decir, las hélices y la mitad de las alas, las colocaron sobre una segunda grúa de la misma empresa.
Aproximadamente a las 19:40 de la noche, el convoy integrado por personal adscrito al VII Regimiento de Caballería Motorizada, de la Policía Federal y agentes de la Policía Rural Estatal, se dirigió sobre la carretera de la vía corta Chetumal-Mérida hasta el entronque con la carretera 307 Chetumal-Cancún, donde al llegar tomaron rumbo hacia el norte hasta llegar al entronque de la carretera Cafetal-Majahual, desviándose hacia el oriente rumbo a Majahual.
Alrededor de la medianoche el convoy llegó al aeródromo del puerto de Majahual, donde la aeronave quedó bajo resguardo del personal de la Secretaría de la Defensa Nacional.
Esta aeronave intentaba introducir de manera ilegal al país 742 kilogramos de cocaína y en el operativo de aseguramiento falleció un Cabo de Caballería, mientras que tres elementos de la Sedena resultaron heridos, entre los lesionados estuvo el comandante de la XXXIV Zona Militar, General de Brigada Diplomado de Estado Mayor José Luis Vázquez Araiza, quienes con su decidida acción lograron decomisar los 742 kilogramos de cocaína y detener a dos personas, además de dos camionetas y armas de grueso calibre. Las investigaciones continúan y se espera tener resultados más contundentes contra el trasiego de droga que ocurre en el sur de esta entidad.