Quintana Roo

Ocupación, arriba del 85%

El Caribe mexicano reporta indicadores de operación arriba del 85% en esta recta final de febrero, con la llegada de segmentos turísticos como el springbreaker y turismo de América Latina que ha venido reportando un crecimiento de dos dígitos en los últimos cinco años.

De acuerdo al Barómetro de la Asociación de Hoteles de Cancún, la hotelería que opera con el sistema “todo incluido”, mantiene nueve de cada diez habitaciones hoteleras ocupadas, lo que representa una ocupación arriba del 94% en esta última semana de febrero.

En el acumulado, Cancún se mantiene en 85% de ocupación hotelera con más de 36 mil habitaciones que operan en el destino y que están siendo ocupadas mayormente por turismo internacional.

El mercado de springbreaker, que refiere la llegada de estudiantes norteamericanos que entran al periodo vacacional, estará aportándole al destino flujos de 15 mil y hasta 20 mil turistas que se dispersarán por los destinos de Quintana Roo, pero sobre todo en Cancún donde los centros nocturnos y bares ofrecen espectáculos y fiestas para su diversión.

Este mercado, que el sector hotelero y de servicios considera positivo, no trae un fuerte poder adquisitivo, sin embargo, genera consumos en marinas y discotecas por lo que su presencia sigue siendo importante para los sectores productivos, aunque su participación en el mercado ha venido disminuyendo en los últimos diez años por la migración que ha tenido el propio segmento a destinos internos de Estados Unidos y destinos de moda en el Caribe.

En México, Mazatlán y Acapulco son regiones que también suelen operar con este turismo joven, que no rebasa los 21 años de edad, y que ahora viaja en grupos y acompañados de un adulto.

En el caso de Cancún, el springbreaker, luego del huracán Gilberto, le representó una fuerte activación y se llegaron a registrar más de 120 mil jóvenes estudiantes en un lapso de cinco semanas.

Ahora, en un volumen más disminuido, sigue presente en el destino, aunque se tiene una mayor dispersión del mercado y sólo se ve su volumen cuando se concentra en los centros nocturnos.

Por Olivia Vázquez