Por Luis Enrique Cauich
KANTUNILKÍN, LÁZARO CÁRDENAS, 26 de febrero.- La Cuaresma inició ayer con el Miércoles de Ceniza, en el cual cientos de feligreses acudieron a la misa de imposición que ofició el padre Jaime Manuel Arias Ramírez y que marcó el comienzo de un período de reflexión para la comunidad católica que se prepara para el Viernes Santo y el Domingo de Pascua.
La iglesia católica para este Miércoles de Ceniza, llevó a cabo dos ceremonias religiosas: la primera a las 8 de la mañana y la segunda fue a las 7 de la noche a fin de que los fieles católicos no se quedaran sin esta imposición de la ceniza que simboliza el arrepentimiento de todos los pecados.
El presbítero Jaime Manuel Arias Ramírez, quien ofició la misa matutina, sostuvo que la Cuaresma es un tiempo de conversión, en donde la conversión debe ser de nosotros mismos y desde el fondo del corazón, preparándose para revivir el Viacrucis del señor en la Semana Santa.
Sostuvo que “hoy comenzamos el tiempo de Cuaresma, tiempo litúrgico fuerte, 40 días de camino hacia la Pascua de Cristo, nuestra Pascua, cuando sin duda queremos, con la ayuda del Espíritu, que sea un tiempo de gracia. Un tiempo de conversión, es decir, de rejuvenecimiento.
En este periodo es que nos damos cuenta que estamos necesitados de Dios, en que debemos acudir a Él para iniciar esa conversión que necesitamos, para crecer en la fe, en el conocimiento de Jesús, en el desarrollo de nuestras capacidades y talentos y ser de la autenticidad cristiana y humana, ser más humanos quiere decir más libres, más responsables, más justos y solidarios. Ser más cristianos quiere decir ser más conscientes y consecuentes de lo que confesamos y creemos, estar más compenetrados con los criterios y actitudes de Jesús.
Externó que “la Cuaresma que hoy comenzamos, significa 40 días de preparación para la Pascua, es decir otra oportunidad que Dios nos brinda para descubrirnos necesitados de perdón y de conversión”.
La segunda misa a la que acudieron decenas de fieles católicos que participaron en las actividades carnestolendas, se realizó poco después de las 7 de la noche en la parroquia de la Inmaculada Concepción, ubicada en el centro de la cabecera municipal.
Los asistentes acudieron a la misa para mostrar su arrepentimiento y así comenzar un período de reflexión, preparándose para recordar el sacrificio de Jesús que murió en la cruz para salvarnos del pecado.
La ceniza se obtiene a partir de la incineración de las palmas del Domingo de Ramos, así como otros objetos considerados como benditos, por lo que la parroquia de Kantunilkín ya está lista para comenzar con los preparativos hacia la celebración de la resurrección de Jesús.
Es costumbre que luego del Carnaval, los asistentes y hasta participantes en las comparsas acudan a misa para recibir la imposición de la ceniza y comenzar este período de purificación, luego de actividades paganas y a menudo pecaminosas.
El Miércoles de Ceniza es una celebración litúrgica móvil, pues su realización no tiene una fecha fija y puede celebrarse entre los días 4 de febrero y 10 de marzo, de acuerdo con cuando cae la Semana Santa.
A partir del Miércoles de Ceniza comienzan los 40 días hacia el Domingo de Pascua, y previo a la resurrección, se realiza la representación del calvario de Cristo antes de ser crucificado en la cruz el último viernes de este período.