Restauranteros no denuncian

De la Redacción

PLAYA DEL CARMEN, SOLIDARIDAD, 26 de febrero.- Al menos el 70 por ciento de los empresarios restauranteros de la zona turística de este destino turístico han recibido llamadas de extorsión, sin embargo, la gran mayoría no denuncia por miedo, reconoció el dirigente Juan Carlos Hernández Cabrera.

El presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados de Playa del Carmen (Canirac) comentó que el fiscal general el Estado, Oscar Montes de Oca, ha tenido el acercamiento con los empresarios de la Riviera Maya a fin de facilitar un número telefónico confiable para que puedan denunciar si son víctimas del delito de extorsión y proceder conforme a derecho.

Recordó que en días pasados el propio fiscal se reunió con empresarios de este destino turístico para implementar estrategia de denuncia que inspire confianza al sector, mismo que daba a conocer que de acuerdo a las cifras por extorsión en Solidaridad sólo tienen registrado ante el Ministerio Público 5 querellas.

En el marco de la entrega de los certificados “Punto Limpio” que otorga la Secretaría de Turismo del estado a diez restaurantes de Playa del Carmen, Hernández Cabrera precisó que trabajan de la mano permanentemente con la Fiscalía General del Estado, incluso realizarán una carta para entregar a los afiliados de la Canirac para incentivar el tema de las denuncias.

Sin embargo, reconoció que denunciar penalmente las extorsiones está muy complicado en Playa del Carmen porque la gente está aterrada, tiene miedo de presentarla, por posibles represalias, por ello el fiscal general proporcionó un número telefónico confiable para hacerlo de manera anónima, sin proporcionar datos personales y la autoridad pueda actuar en consecuencia.

Enfatizó que esa confianza que el fiscal, Oscar Montes de Oca, les trasmite como directivos de la Canirac, es para replicarla con los afiliados y a cada uno de los empresarios para fortalecer la denuncia, a fin de reducir ese 70 por ciento de casos de extorsión que no se denuncia.