La cancelación de las rutas de transporte fluvial ente Carmen y Palizada, debido a la pandemia del COVID-19, afectaron a decenas de ciudadanos de estos dos municipios, quienes cuentan como principal vía de comunicación las lanchas que atraviesan la Laguna de Términos y el río Palizada; la medida implementada por la alcaldesa Maritza Díaz Domínguez no fue debidamente difundida, tomando por sorpresa a quienes requieren viajar diariamente.
Algunos, como doña Ruperta Correa Ventura, viajaron hasta la Isla del Carmen por sus medios en botes particulares, pero ya no encontró el habitual servicio de regreso.
Desde la tarde del lunes, el decreto de Díaz Domínguez circuló en sus redes sociales que al parecer no tuvieron el alcance deseado como a doña Ruperta Correa Ventura, que se enteró ya en Carmen que no había transporte de vuelta.
“No hay transporte ahorita, si, pues viene uno a hacer las compras, por eso viajamos para acá desde Palizada en la Rivera, vine ayer -el domingo-, pero vine con una lancha de propiedad y pensé en regresarme pero no hay”.
Correa Ventura sostuvo que en ningún momento le avisaron o supo que esta medida se tomaría de forma sorpresiva, afectándole bastante a ella y muchas personas en situaciones así.
Mientras daba su opinión, personas ofrecían viajes por tierra a Palizada con costos similares pero más largos en tiempo, de cuatro a cinco horas de camino, cuando por el río son dos horas.
La decisión de la alcaldesa priista Díaz Domínguez podría haberle dado un golpe directo y grave en su economía a muchas personas por no avisar el cierre con anticipación.
“Eso está mal, porque deberían pasarlo por radio o televisión para que supiéramos, eso nos está afectando a todos los que somos de allá para Palizada”.
La gente que vive ahí en el río, todos venimos a comprar acá la mercancía, la comida. Ya ahorita hay unos vecinos que se van y ya me voy con ellos ahorita, de hecho ya están saliendo, sostuvo la mujer paliceña.
(Texto y fotos: Agustín Ferrer)