Quintana Roo

Insuficiente infraestructura hospitalaria en Quintana Roo

Quintana Roo tiene más de 100 mil personas en la edad considerada de riesgo para contraer el coronavirus COVID-19 y una infraestructura hospitalaria con mil 100 camas de las que 973 son censables distribuidas en IMSS, ISSTE, Sedena, Semar, Secretaría de Salud y DIF; el resto, están en hospitales privados.

Las autoridades sanitarias federales han sido claras, al reconocer que la opción que tiene el país para evitar muertes por COVID-19, es el aislamiento social, ya que de no hacerlo los hospitales que operan en México no serán suficientes para atender a todas las personas que contraigan la enfermedad.

Los sectores de población que están en riesgo son tres: los niños menores de cinco años, las mujeres embarazadas y quienes padecen enfermedades inmunodepresivas, crónicas, cardiacas, pulmonares, renales, hepáticas, sanguíneas o metabólicas y obesidad y sobrepeso, ha sostenido la Secretaría de Salud.

El Consejo Estatal de Población (Coespo) de Quintana Roo estableció que en 2019 la entidad contaba con 121 mil 407 personas entre los 60 y 109 años de edad, los cuales, son los más susceptibles a contraer la enfermedad declarada como pandemia por la Organización Mundial de la Salud.

El mismo Coespo explicó que México, como parte de los países en plena transición demográfica, experimenta un intenso y acelerado envejecimiento poblacional debido a la disminución progresiva en la fecundidad, el descenso en la mortalidad y el efecto de la migración, lo cual tendría implicaciones considerables en la salud, entre otras cosas.

Además, como caso especial, en Quintana Roo, debido a que tiene natalidad intermedia y mortalidad baja, es uno de los estados en plena transición demográfica.

A este sector de la sociedad se le suma el otro que también es de alto riesgo: los menores de cinco años. Para mediados del año pasado, la Coespo estimó que de la población total de entidad, más de 163 mil tenían entre 0 y 5 años de edad.

El sábado pasado, Hugo López Gattel, subsecretario de Salud federal, fue enfático y claro al decir que México está atravesando su última oportunidad para reducir la velocidad de transmisión del virus, pues de hacerlo hay riesgo de que los hospitales se saturen y no haya oportunidad de atender a todas las personas que requieran atención hospitalaria.

Infraestructura hospitalaria en Quintana Roo

El estado más importante de México en materia turística tiene una infraestructura hospitalaria reducida, con apenas mil 100 camas de las que 973 son camas censables distribuidas en: IMSS, ISSTE, Sedena, Semar, Secretaría de Salud y DIF. El resto, el mínimo, están ubicadas en hospitales privados.

De acuerdo al Diagnóstico situación del Sector Salud del estado de Quintana Roo, el estado también cuenta en su infraestructura hospitalaria con 529 camas no censables, de las que 287 pertenecen al IMSS, 163 de la Secretaría de Salud, 52 del ISSSTE, 15 DE Sedena y 12 de Semar. Las camas no censables son las destinas a la atención transitoria o provisional para la observación del paciente.

La mayor parte de la infraestructura se encuentran en seis clínicas del IMSS, con 444 camas censables, que tiene a disposición 970 médicos, mil 500 enfermeras   y mil paramédicos. El IMSS tiene un registro de un millón 300 mil derechohabientes en el estado.

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en Quintana Roo funcionan 257 unidades médicas, entre hospitales, clínicas y centros de salud, de los cuales 230 son operados por el gobierno del estado y en ellos laboran 11 mil 884 médicos. Esto indica que por cada 115 derechohabientes hay únicamente un médico.

Asimismo, el Plan de Gobierno de Quintana Roo 2016-2021, en su apartado de “Salud Universal”, se da a conocer que el  CONEVAL -Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social- identificó que en Quintana Roo el 18.5% de la población no tiene acceso a servicios de salud.

En los municipios de Benito Juárez, Othón P. Blanco y Solidaridad es donde está el mayor porcentaje de personas sin derechohabiencia.

Asimismo, del porcentaje de la población derechohabiente a servicios de salud, la mayoría se concentra en las instituciones públicas del IMSS y del ISSSTE;  a su vez, 28% de la población estaba inscrita al Seguro Popular, y 3% -23 mil 290 personas- de la población destina gran parte de sus ingresos al cuidado de su salud en instituciones privadas.

Con información de María Luisa Vázquez/Eva Murillo

Por Redacción Por Esto!