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Locatarios del Mercado Público “Alonso Felipe de Andrade” (AFA) se defendieron de las amenazas de personal de Comisión Para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Copriscam), quienes acudieron alrededor de 14:40 horas, exhortando a locatarios de puestos que no son de alimentos y productos básicos, y que no son considerados esenciales, a cerrar sus locales ante la contingencia por el COVID-19 estando en la Fase 3, pues de lo contrario serían clausurados.

Personal de Copriscam, quienes desde hace varios se encuentran realizando verificaciones en negocios no esenciales y han procedido a la suspensión de varios comercios en el primer cuadro de la Isla, amenazaron con llamar a la Guardia Nacional al ver la reacción de los locatarios, quienes no se dejaron amedrentar ante sus amenazas de cerrar sus puestos, por lo que se armó el alboroto.

Cabe señalar que en ningún momento mostraron algún documento oficial donde deben retirarse y cerrar sus locales; al no llegar a ningún acuerdo con firma de que se trate de algún decreto, personal de Copriscam se retiró del lugar, ya que los locatarios se les fueron encima argumentado que trabajarán con las medidas preventivas sanitarias, ya que es su única fuente de ingreso, y que tienen que trabajar para vivir pese al riesgo que esto represente.

Los comerciantes hicieron un llamado al Gobierno del Estado a que los apoyen de alguna manera, pues necesitan llevar el sustento a sus hogares.

El altercado se dio con los pocos locatarios que mantienen abiertos sus puestos, indicaron que si se quedan en sus casas se iban a morir de hambre. Luego del altercado lograron que los trabajadores de Copriscam, a quienes acusaron de prepotentes, desistieran de la clausura no sin antes amenazar que regresarían con personal de la Guardia Nacional para clausurar, lo que molestó más a los locatarios que los corrieron del lugar.

Consideran que hay empresas como Coppel y Elektra, que también se las apliquen a ellos y a todas las tiendas departamentales, así como a los vendedores ambulantes, ya que no cuentan con cubrebocas ni con gel antibacterial, no tienen ninguna medida sanitaria, “por qué vienen a exigirnos a quienes sí cumplimos y a ellos no les dicen nada, no es justo”.

Juan López, representante del área de pescadería, hizo un llamado a las autoridades, quienes deben aplicar un orden o una propuesta en donde ellos puedan seguir trabajando, porque quienes se dedican a esa actividad comercial no reciben ninguna clase de apoyo de nadie, ya que no cuentan con ninguna pensión, además son quienes llevan el sustento económico de sus familias y ahora con esta sugerencia de cerrar señalan que no les va a matar el COVID-19, sino el hambre, al no contar con esa fuente de ingresos.

“Esperemos la ayuda del Gobierno, quien es el responsable de ayudar a los comerciantes que sufren con éste problema, porque si recibiéramos algún tipo de ayuda o nos entregaran alimentos o dinero, entonces no habría preocupación de cerrar nuestra fuente de trabajo, pero al no tenerla tenemos que seguir trabajando en nuestros negocios para vender y tener ingresos”, concluyó.

(Texto y fotos: Patricia Gómez / Jorge Villanueva)

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