De la Redacción
CHETUMAL, 9 de mayo.- Elementos de la Policía Quintana Roo fueron sometidos y avasallados por seis presuntos pandilleros que se hacen llamar “Los Canules”, en la colonia Adolfo López Mateos. Los pandilleros golpearon y privaron de su libertad a un elemento policial, posteriormente apedrearon una patrulla y después de una negociación entre el comandante “Inés” y el comandante “El Diablo”, los presuntos pandilleros entregaron al oficial retenido sin que hubiera algún detenido, dejando impune este hecho.
Según información recabada con vecinos y elementos policiales, alrededor de la 18:15 horas un grupo de motopatrulleros se encontraban patrullando sobre la calle Luis Moya, cuando a pocos metros antes de llegar al cruce con la avenida CNC seis pandilleros lograron derribar a uno de los motopatrulleros.
Dos de éstos de inmediato lo metieron a una casa y ahí adentro le quitaron su radio Matra y su arma, mientras los otros cuatro vigilaban, uno de los policías al ver lo que ocurría de inmediato pidió refuerzos.
Al lugar llegaron cerca de 10 oficiales a cargo de los comandantes “Inés” y “El Diablo”, los cuales fueron recibidos con una lluvia de piedras por parte de “Los Canules”, los elementos se vieron superados por los seis pandilleros, al grado que tuvieron que realizar dos detonaciones para que éstos se escondan en su predio.
Según comentan los vecinos y elementos policiales, los dos comandantes en el lugar al parecer conocían a los pandilleros, ya que de inmediato los identificaron como “Los Canules”, por lo que de inmediato se acercaron a dialogar para llegar a un arreglo, a pesar de las agresiones hacia los demás policías y que incluso tenían a uno detenido.
Según comentan los vecinos, en ningún momento los pandilleros se vieron intimidados por los mandos policiales, al contrario, los elementos policiales parecían ser regañados por lo pandilleros, éstos terminaron por advertirles a gritos a los mandos policiales “nadie se mete con nadie y no los quiero ver pasar por aquí”, ya que tanto vecinos como elementos policiales escucharon este increíble reclamo; siendo que después de esto los policías simplemente acataron la indicación.
Después de esto, tanto el comandante “Inés” como “El Diablo”, de manera increíble dieron la indicación de normalizar y retirarse del lugar, situación por demás alarmante, pues quedó claro el contubernio entre los presuntos pandilleros y los mandos policiales.
Cabe mencionar que los mandos policiales identificados como “Inés” y “El Diablo”, han estado envueltos en distintas controversias; por su parte, “Inés” es allegado a Simón Pérez “Delta”, el cual es uno de los alfiles e incondicionales de Alberto Capella.
Según fuentes al interior de la corporación, el comandante Simón Pérez habría presionado al secretario de Seguridad Pública, Alberto Capella, para tener a “Inés” como mando en la ciudad de Chetumal; sin embargo, con esta situación queda claro que sus acciones dejan mucho que desear.
Por otra parte, está el comandante “El Diablo”, el cual ha sido señalado en múltiples ocasiones de cometer atropellos en contra de la ciudadanía, tal es el caso del día 13 de marzo de este año, cuando fue captado sometiendo de manera ilegal a un grupo de jóvenes estudiantes que bailaban en la calle.
Tal parece ser que el trabajo de estos mandos policiales simplemente deja mucho que desear, pues doblan las manos ante los criminales e incluso permiten que éstos golpeen a los policías sin recibir ninguna sanción.
Cabe destacar que los dos mandos policiales lograron rescatar al elementos policial retenido y se le fueron entregadas sus cosas, no sin antes haber quedado en evidencia y ridículo ante la ciudadanía y mal parados con sus compañeros de trabajo.