La cuarentena ha sido el caldo de cultivo, al aumentar las horas de convivencia en el hogar
* Personal del DIF monitorea los casos que llegan a las 11 delegaciones * Instalaciones de asistencia social fueron sanitizadas para evitar los contagios de COVID-19
Por Pedro Hernández
CHETUMAL, 20 mayo.- La cuarentena provocada por el virus COVID-19 ha propiciado que los casos de violencia familiar aumenten debido al cambio en las actividades en el seno familiar y el incremento de horas para pasar juntos, esta situación es monitoreada por el personal del DIF, quien en los meses de abril y mayo han brindado atención a niñas, niños y adolescentes que pasan por este lamentable acontecer.
A pesar de que el personal de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños, Adolescentes y la Familia se encuentra en cuarentena y laborando desde sus casas, permanece monitoreando los casos que llegan a las 11 delegaciones, puesto que los índices de violencia han aumentado debido al aumento en el tiempo que conviven las familias al no acudir a trabajar, el estrés que se refleja al no estar activos o permanecer encerrados, aunado a la falta de empleo y entradas económicas, son algunos de los factores que propician que se ocurran estos