Por Miguel Améndola
TULUM, 22 de mayo.- La falta de sensibilidad, de ayuda y humanidad ha sido la otra pandemia para las personas de la tercera edad en periodo del COVID-19, ya que a abuelitos que viven solos se les ha negado el ingreso en algunos centros comerciales.
A casi dos meses de que inició la cuarentena y con ello diversidad de restricciones, en algunos negocios, en lo particular supermercados se han visto tratos deshumanos como lo es no permitir el acceso a los ancianitos.
Es el caso de don Juan Chío, quien al acudir a la tienda Chedraui fue detenido en la puerta y le impidieron el ingreso, donde los empleados e incluso el gerente argumentó que no lo dejaban pasar por ser de la “tercera edad”.
Tal situación entristeció y a su vez enfadó al señor Juan porque en estos momentos se encuentra solo en Tulum, únicamente acudía para comprar sus alimentos para tener todo lo necesario y ya no salir de su domicilio.
Expuso que los adultos mayores podrían morir de hambre por la falta de sensibilidad de negocios que no comprenden que hay gente sin familia y no les queda más que ir solos a comprar alimentos o víveres.
Asimismo agregó que incluso van a realizar sus compras con el riesgo de contagiarse y muy probablemente morir, al ser el sector más vulnerable en esta pandemia.
Por su lado, Mariano Enríquez, manifestó que ir a comprar a los supermercados y es lamentable ya que hay discriminación así como falta de respeto a los derechos humanos ya que los abuelitos no tienen otra opción que comprar por su propia cuenta.
Dijo que si hasta a las personas sanas se les complica ir a comprar solas, por las restricciones, deben considerar que los ancianos tienen mayor dificultad para realizar estas tareas.
Al recurrir al Sistema DIF para preguntar sobre si están desplegando algún programa de apoyo para aquellos ancianitos que no tienen familia, no se tuvo respuesta por parte de la dependencia.
Lo cierto es que hay personas de la tercera edad que están en abandono de sus familias y por sus propios medios buscan para comer, pero también se enfrentan a la negativa para conseguir sus alimentos.