Por Karina Carrión
COZUMEL, 27 de mayo.- Integrantes de la la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en Cozumel entregarán a la Dirección de Desarrollo Urbano un “Manual de Prevención para la Industria de la Construcción por la epidemia del COVID-19”, a fin de proporcionar los lineamientos de la seguridad a los actores que participan en la industria de la construcción, quienes podrán reactivar su labor a partir del próximo primero de junio.
Dicha información fue proporcionada por Eduardo Hernández Vázquez, dirigente de la CMIC en Cozumel, quien señaló que dicho manual fue integrado por el Colegio de Arquitectos de Cozumel A.C., Asociación de Ingenieros y Arquitectos de Cozumel A.C., el Instituto de Capacitación de la Industria de la Construcción (ICIC) y el Colegio de Ingenieros Civiles de Cozumel A.C.
El cuaderno fue elaborado con base en el decreto presidencial que establece que mientras prevalezca la emergencia sanitaria, la construcción se considerará actividad esencial, debido a que así fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el 13 de mayo de mayo de 2020, donde se estableció también que “a partir del 18 de mayo, las empresas deberán prepararse para la reapertura con la aplicación general de la elaboración, por parte de la empresa, de protocolos sanitarios para el reinicio seguro de actividades, dependiendo del número de trabajadores”.
En dicho manual se encuentran lineamientos para garantizar la capacitación de personal para seguridad en los lugares de trabajo; la adecuación de espacios y procesos productivos de acuerdo con lo establecido por las autoridades sanitarias, además de la instalación de filtros de ingreso, sanitización e higiene del espacio laboral.
Hernández Vázquez, mencionó que entre la conformación del “Plan de Aplicación del Protocolo Sanitario para las Obras”, el responsable de los trabajadores deberá realizar un plan que planteé las estrategias, alternativas y actividades necesarias para minimizar o mitigar la transmisión del COVID-19.l
“De manera que aseguré la protección de los trabajadores de la construcción, así como otros lineamientos planteados para entregarse a la Dirección de Obras Públicas y posteriormente a los representantes de cada sindicato obrero, para la adecuación de dichas medidas que deberán de cumplirse para su reactivación el primero de junio”.