Adriana Pérez Jiménez, vendedora de panuchos frente a la entrada del Acceso 1 del Puerto Industrial, aseguró que ella sí ha sentido en la baja de sus ventas, la disminución del personal que sube a laborar costa-afuera en las plataformas petroleras, principalmente de Petróleos Mexicanos (Pemex).
“Si he escuchado que los de Pemex están recortando personal, de 50 personas que llegaban, ahora vienen sólo 30, ese tema nos afecta bastante porque dependemos de ellos”.
A partir de la pandemia bajaron las ventas porque aparte de que no nos dejan vender, nos quitan y tenemos que buscar lugares donde vender nuestros productos, sostuvo la mujer.
Para Adriana Pérez, la situación se complica principalmente porque ella mantiene a sus padres que son personas de la tercera edad que también requieren más cuidados.
“Esto está así desde que empezó el 23 de marzo. Hay personas que dependen de mí, mis padres que son mayores de edad, trabajo para ellos para mantenerlos, pagar renta, luz servicios”.
No nada que me llegan apoyos de Gobierno, no va a llegar y ahora con lo de la inundación que nos llegó el agua hasta las rodillas, yo vivo aquí a la vuelta, ningún apoyo, nada, ni despensas ni nada, contestó la comerciante ante el cuestionamiento si había sido beneficiada de algún subsidio.
Aunque existen denuncias de otros comerciantes que los retiraron las autoridades sanitarias, algunos sin motivo alguno supuestamente, Adriana Pérez sostuvo que ella estará hasta que pueda en el mismo sitio.
“Tenemos que seguir hasta donde se pueda llevando el sustento a la casa. El tema de la enfermedad nos preocupa, nosotros como vendemos podemos llevar la enfermedad a la casa, claro que nos preocupa”.
Cuando llego a la casa me cambio de ropa, la lavo, me baño, ojalá que eso pase pronto, agregó la vendedora ante el peligro de contraer el COVID-19 que, acorde a las cifras de la Secretaría de Salud (SSa), permanece principalmente costa-afuera.
(Texto y fotos: Agustín Ferrer)