Tulum y Cobá dejan de captar 24.9 mdp

TULUM, 15 de junio.- Será el semáforo en color amarillo lo que determine la reapertura de de las zonas arqueológicas de Tulum y Cobá, declaró Margarito Molina Rendón, delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Quintana Roo, quien dijo que de momento, es incuantificable el dinero que se ha dejado de percibir por concepto de las entradas.

En ese contexto, comentó que no se pueden aventurar ni a dar alguna fecha tentativa para reaperturar del recinto de monumentos mayas.

Apuntó que además del semáforo a nivel federal, también hay dos vertientes a considerar, que es el protocolo que está elaborando el INAH en conjunto con la Secretaría de Cultura y el reinicio de funciones que dependen del visto bueno del Gobierno del Estado a través de la Secretaría de Turismo.

“Las zonas arqueológicas se abrirán cuando esté la luz de color amarillo del semáforo federal. Esto no sabemos cuándo vaya a ser, depende del comportamiento de ciertos componentes que determinan, y por lo tanto, eso impide que tengamos una fecha precisa para abrir. Además tendremos que implementar un protocolo que están laborando el INAH, a nivel nacional, para aplicarlo; para ello tendremos que hacer un simulacro porque tenemos que proteger a nuestro personal y visitantes con medidas de higiene, sanidad y seguridad, para que no haya posibles contagios”, acotó.

Expuso que como medidas higiénicas y preventivas, están el uso de gel antibacterial, lectura de temperatura, y hasta un control del número de visitantes que se basa en un porcentaje de aforo.

Mencionó que si antes se tenía un promedio diario de tres mil a cuatro mil a la zona arqueológica de Tulum, y entre mil 500 y dos mil al recinto amurallado de Cobá, ahora tendrán que bajar el número de afluyentes para no propiciar las aglomeraciones.

Estimó que los números de otros años se van a reflejar a finales de 2020, y con base a ello, se empezará a denotar una recuperación económica para los sectores involucrados.

Por otra parte, expuso que el efecto del Covid-19 sigue causando estragos de manera que, evidentemente, descenderán dichas estadísticas de visitantes cuando aperturen.

“En estos primeros meses y hasta final del año, los números de visitantes serán muy bajos debido a la poca afluencia de viajeros. No va a llegar de buenas a primeras a altos números, será gradual y paulatino, además, hay que considerar que por más que se tenga el protocolo de que nada más pueden ingresar un 30 %, se tiene que tener muy en cuenta que van a ser mucho menos de esa cantidad de visitantes”, acotó.

Afectaciones económicas

Cabe recordar que fue el pasado 23 de marzo cuando los sitios arqueológicos cerraron, por lo que desde entonces, Tulum y Cobá han dejado de captar la entrada de entre cinco mil y seis mil visitantes al día, donde el costo de entrada es de 75 pesos por persona.

Asimismo, de acuerdo con cifras extraoficiales, se supo que alredor de un 30% de esas entradas registradas son gratis, pues son accesos libres que se les da a estudiantes, maestros, adultos mayores de 60 años y personas con capacidades diferentes.

De esa manera, se calcula que entre los dos sitios se estaría dejando de percibir aproximadamente alrededor de 300 mil pesos diariamente.