Luego de que hace unos días se hiciera público el caso en el que un estudiante fue señalado por intimidación y acoso hacia una de sus compañeras dentro de la Universidad del Caribe, la Comisión Revisora de la casa de estudios encontró causales para sancionarlo con una baja definitiva, luego de que finalizara su baja temporal, debido a que hubo más acusaciones en su contra por lo que la universidad tomó la resolución de suspenderlo definitivamente; aunque solicitó revisión de su caso, la decisión fue ratificada.
Este método de atención a casos de acosos se creó en julio de 2019 cuando se conformó la Comisión Revisora dentro de la Universidad del Caribe. Son cuatro las quejas que terminaron con un resolutivo: uno, en cuyo caso no se recontrató a un docente, una baja temporal y dos suspensiones.
La alumna Mariel J. publicó en sus redes sociales que hace un año sufrió acoso por parte de su compañero Valentín A.P. Posteriormente, el 11 de octubre notificó a la universidad, ya que a partir de julio el plantel implementó un procedimiento para la atención de acosos y hostigamientos sexuales, que analiza y sanciona las conductas antisociales y violentas. A finales del año pasado, la escuela notificó a la alumna que se habían tomado cartas en el asunto, dando al alumno acusado baja temporal.
“Durante todo este proceso, el compañero estuvo acosándome de una manera en la que ya no podía andar sola por los pasillos de la universidad. Siempre tenía que estar con mis amigos, e incluso un amigo me acompañaba a la parada del autobús o tomaba el mismo”, escribió Mariel.
Tiempo después, detalló que se enteró de no solo ella sufrió acoso por parte de Valentín, sino que fueron alrededor de 10 compañeras más, por lo que se le dio de baja definitiva ya que habían ocho quejas en su contra. Sin embargo, hace dos semanas aproximadamente, Mariel recibió un correo institucional donde se le explicó que Valentín exigió una revisión de los motivos, por lo que la casa de estudios le pidió que enviara las pruebas; acto seguido, consiguió fotos, capturas de pantallas y audios que revelaron lo acontecido, pero la universidad, al final, le dio como resolución la baja temporal.
Ante este panorama, la secretaria de Extensión y Vinculación Universitaria, Celina Izquierdo, explicó que encontraron que la persona señalada, había tenido responsabilidad por lo que se le dio una sanción de baja temporal por un semestre en 2019, y que posteriormente hubo otro caso muy similar, al mismo tiempo, por lo que se decidió darle la baja definitiva.
“Al estudiante no se le pudo notificar de la baja definitiva porque ya estaba de baja temporal, entonces se guardó el expediente para cuando regresara de ella, que acaba de ser hace unos días, y le notificamos que su baja era definitiva, entonces solicitó una revisión”: dijo.
Posterior a esto, se formó una comisión para revisar el caso, donde se analizaron los elementos que había para esa segunda sanción, quienes reconocieron que sí había falta y merecía sanción, por lo que la comisión acordó por unanimidad que debería ser una baja definitiva.
“No solamente eso, sino para que el pudiera reincorporarse, si así lo quisiera, primero tendría que presentar un documento emitido por una instancia pública en sentido de que él está en condiciones de integrarse a una actividad escolar y de convivencia con otras personas, también se le instruyó a que tenga el menor contacto con las personas que lo señalaron”,: indicó Celina Izquierdo.
Añadió que se hizo lo pertinente de acuerdo con la revisión que solicitó el alumno. “No es que se dejen pasar las cosas, se encuentran las dificultades y se sancionan, pero conforme a la normativa, conforme a lo que se considera que es el problema causado. Es un asunto de construcción de criterios de la gravedad del tema”.
Por Diego Ramos