La oficina estatal de la Confederación Nacional Campesina (CNC) cerró sus puertas en la capital del estado definitivamente por falta de personal, solvencia económica, además dejó de ser gestora de los apoyos y programas para los hombres del campo, señaló el ex secretario de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos, Álvaro Mendoza Ramírez.
Las oficinas de la CNC estatal están ubicadas en la avenida Javier Rojo Gómez entre Insurgentes y calle Tela, en Chetumal, la cual desde hace varias meses se encuentra abandonado.
El ahora gerente de Proveedores de Granos Básicos de Quintana Roo destacó que la debacle de la otrora poderosa organización campesina inició hace cuatro años cuando llegó al gobierno de Quintana Roo una coalición diferente al partido político que fundó a la CNC en el año 1938, pues paulatinamente les retiraron los apoyos para el mantenimiento de la oficina y pago de sueldos al personal.
El 1 diciembre de 2018 recibieron el golpe final cuando anunció el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, que los apoyos les iban a llegar directamente a los campesinos, sin intermediarios por lo que la CNC prácticamente dejó de existir en Quintana Roo.
La Confederación Nacional Campesina (CNC) no hizo válida la famosa frase “renovarse o morir”, pues hoy solamente queda como mudo testigo las abandonadas oficinas y las siglas que son identificadas con el viejo régimen, acotó.
Finalmente, expresó existía algarabía y una afluencia masiva, pero ahora la oficina de la CNC está cerrada porque no realiza ningún tipo de gestoría, porque los campesinos fueron censados en sus ejidos y acuden directamente a las ventanillas de las oficinas federales a cobrar los apoyos.
Con información de Luis Enrique Tuz