El descenso de temperaturas en Cancún logró lo que el COVID-19 no ha podido: disminuir la presencia de bañistas en las playas.
Luego del mediodía de este sábado el termómetro se mantuvo en 23 grados pero la sensación ambiental en la playa no fue suficientemente calurosa para que sus visitantes de animaran a introducirse al agua del Caribe mexicano.
El aire frío redujo el interés en los turistas para asistir a las playas de Cancún, el polo turístico más importante de México, los arenales el día de hoy lucen prácticamente vacíos, y los pocos visitantes que se pueden observar usan alguna prenda para cubrirse del aire.
Algunos prestadores de servicios turísticos dijeron que está última semana descendió “de manera considerable”, el número de bañistas, luego de que terminó el periodo vacacional de invierno, además que el mal tiempo influye para los que se encuentran de vacaciones aún realicen otras actividades.
En Playa Gaviotas no hay filtros sanitarios en los accesos además que no hay quien verifique el uso de cubre bocas.
Cancún es la ciudad con más casos positivos de coronavirus registrados y en defunciones, hasta el momento cuenta con un acumulado de siete mil 910 contagios y mil 340 decesos desde que fue detectado el primer contagio en este destino turístico.
CG