Los profesores de la secundaria general, Ko'oten Kaambal han tenido que enfrentarse a los problemas psicoemocionales que ha dejado la pandemia en las familias del estudiantado, al ser la base de la sociedad y ahora más que nunca han tenido que hacer un trabajo conjunto con los padres sobre el Manejo de las Emociones, porque ha tenido casos de alumnos que han bajado sus calificaciones porque pereció algún ser querido por el COVID-19, informó el director dicha institución educativa, Víctor Manuel Manzanilla Basulto.
Sin hablar de deserción, el profesor especificó que de los alrededor de 480 estudiantes con los que cuenta el plantel, el cinco por ciento no se ha reportado y hasta ahora desconocen qué pasó con ellos.“Nadie puede calificar las condiciones en las que están las personas, por el confinamiento, no todos lo estamos viviendo y las condiciones económicas más que nada. Cuando las clases eran de manera presencial podíamos hablar de deserción”, asentó.
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Víctor Manuel Manzanilla considera que en tiempos del apogeo de la pandemia no es cabal que el sector educativo, utilice el término de deserción, debido a que el coronavirus vino a sacudir desde la estabilidad económica y emocional de las familias de los estudiantes.
El director de Ko'oten Kaambal aseveró que la materia para los profesores del Manejo de las Emociones es un tema que aborda la misma Secretaría de Educación desde la formación del docente, sin embargo, no se ha dado este interés porque ha sido menospreciado por el gremio por los objetivos a alcanzar en los conocimientos.
“Cualquier papá pensaría que español y matemáticas es lo que más importa, pero no es total, porque hay cosas más pequeñas que definen la formación del alumno. Todas las asignaturas tienen la responsabilidad de trabajar las cuestiones emocionales, el maestro tiene que dar el ambiente para que el joven reciba el conocimiento”, dijo.
El director mencionó, “en base a ello dimos consejos que pudieron haber sido equivocados, porque a veces instruimos y evadimos cierta responsabilidad, que sea lo más fácil, pero la verdad es que hay que ver cómo vivimos y en qué condiciones estamos”.
“Esta experiencia les trae mucha enseñanza sobre la humanidad y que todos se necesitan y deben apoyarse, pero desgraciadamente la separación que nosotros hemos visto es de los hijos con los padres, ese es el problema que existe y que desgraciadamente nosotros como maestros contribuimos, por eso este ser microscópico nos vino a dar una clase de conciencia”, expresó.
Aunque en la escuela siempre se procura tener una mejor comunicación entre los alumnos, maestros y padres de familia, tratan de buscar más que nada las formas para ser asertivos.
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JCL