La marea alta provocada por el eclipse desplazó un gran volumen de plásticos hacia los manglares, en los alrededores de la laguna Makax, confirmaron prestadores de servicios y vecinos, quienes pidieron que se realice una campaña de limpieza antes que la basura sea arrastrada hasta el mar.
Sin embargo, ni la Dirección de Ecología municipal ni grupos de voluntarios contemplan jornadas de limpieza para esta semana, según sus representantes.
En los últimos días, el nivel del mar se elevó hasta 70 centímetros, por lo que ingresó más de 10 metros tierra adentro, y arrastró todo tipo de basura hacia los bordes de la laguna Makax y otros cuerpos de agua del municipio, dijeron los prestadores de servicios Fabián Iuit y Gonzalo Pérez.
Además, los efectos del eclipse se combinaron con los vientos del sur y provocaron la erosión de varias playas, que perdieron entre 10 y 20 por ciento de su superficie.
Anualmente de la playa costera del Parque Nacional de Isla Contoy se retiran alrededor de 500 kilos de plásticos, pero se podría estimar que este año el volumen aumentaría, debido a que se ha incrementado la basura recolectada a lo largo de ocho kilómetros de costa.
Sin embargo, no toda la basura recala en estaÁrea Natural Protegida; muchos se internan en el Canal de Yucatán y el Golfo de México, y la corriente los arrastra hasta las grandes islas de plásticos del Atlántico.
De acuerdo con una publicación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en el 2020, en el Atlántico sur había una isla de unos 715 kilómetros cuadrados, con dos mil 860 toneladas de plástico.
La mayor isla de plástico, ubicada en el Pacífico Norte, a unos mil kilómetros de Hawái, contiene mil 800 millones de piezas; pesa unas 80 mil toneladas y tiene un área aproximada de 1,6 millones de kilómetros cuadrados. Además, entre Australia y América del Sur hay otra del tamaño de Irán.
La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) recomendó a los prestadores de servicios náuticos que promuevan erradicar el uso de plástico en sus embarcaciones a fin de proteger el ecosistema costero, principal freno a la erosión por meteoros.
Tampoco deben tirarse colillas de cigarros, cerillos y vidrios en las playas; evitar comprar productos cuyos envases vayan al mar y denunciar malas prácticas, a fin de generar un entorno saludable.
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HS