Por lo general, cuando los campesinos milperos de los ejidos pertenecientes al municipio quieren sembrar maíz criollo se van a Yucatánpara conseguir la semilla, debido a que en la localidad casi nadie tiene, porque actualmente la mayoría de los milperos siembran semilla de maíz híbrido, indicó Felipe Cimé Cool, un experimentado productor del Ejido de Cafetal Grande.
Dijo que cuando llegó a Quintana Roo, hace 50 años, la gente como él, empezaba a hacer milpas y sembraba algunas variedades de maíz, como sak tux (hoyuelo blanco), bek’ech bakal (elote delgado), X mejen Naal (maíz de ciclo corto) y Pix Cristo (sangre de Cristo).
Expuso que todas esas variedades de maíz pegaban muy bien, y por lo mismo, el campesino tenía para comer y para levantar la semilla, pero con el paso del tiempo empezó a mermar la cosecha.
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Abundó que esa situación hizo que la semilla se fuera perdiendo y por lo mismo, ahora se hace difícil conseguir en esta zona esas variedades de maíz para sembrar.
Comentó que la pérdida de esas especies de maíz ha hecho que el campesino opte por sembrar ahora el maíz híbrido, porque da un poco más, aunque para dichos resultados también hay que echarle algún fertilizante.
Manifestó que los campesinos saben que el maíz criollo es mucho mejor que el híbrido, por eso, dijo que cada año buscan sembrarlos en sus milpas, porque saben que si llegara a pegar bien, la cosecha pueden guardarlo, cosa que no se puede hacer en el caso del híbrido.
Según Felipe Cimé Cool, el maíz híbrido solamente se puede conservar 4 meses, en cambio el nativo, se mantenía hasta 4 años en el troje.
Cabe señalar que cuando el maíz criollo pegaba bien, la gente del campo acostumbraba a sembrar hasta 500 mecates, 10 hectáreas, pero ahora ya es muy complicado trabajarlo en esa superficie, por lo que se opta por realizarla en una o dos hectáreas máximo.
Por lo que es raro encontrar campesinos de los ejidos que sigan haciendo 4 o 5 hectáreas de milpa, porque saben que ahora es muy aventurado hacer tantas proporciones debido a que también llueve en menor proporción cuando el maíz se encuentra espigando.
Por último, manifestó que la sequía a veces se mantiene por varios meses, aunque, señaló que este año, “como que hay señales de que pronto van a llevar las lluvias, y eso es bueno”.
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NR