La concesionaria CELSOL S.A.P.I. de C.V., también conocida como OE Optima Energía, persiste en ofrecer un servicio deficiente en el alumbrado público del municipio de Benito Juárez en Quintana Roo.
Los habitantes de la Región 100, específicamente en la calle 121N y la avenida Chac Mool, son los principales afectados por la falta de iluminación. Don Roger, jardinero de profesión, señala que ha perdido la noción del tiempo que llevan sin funcionar las lámparas.
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Su principal preocupación radica en la inseguridad que esto genera, ya que los delincuentes se aprovechan de la oscuridad para cometer robos. Narró que recientemente, el 11 de febrero, un vecino perdió la vida al intentar defender a un amigo durante un asalto.
Además, recordó casos en los que los ladrones se han escondido en la oscuridad para evadir a los vecinos, cuando son encontrados en el interior de los domicilios e intentan detenerlos para entregarlos a la policía.
El tramo de la avenida Chac Mool, comprendido entre la avenida Miguel Hidalgo (ruta 5) y Francisco I. Madero (ruta 4), carece por completo de iluminación a pesar de contar con un parque.
La iluminación no es suficiente por la falta de poda de árboles que lo rodean. En recorrido hecho por el diario Por Esto! se pudo apreciar como las luces de los autos dan forma a las siluetas de personas, jóvenes e incluso niños correr para cruzar la avenida en plena oscuridad pudiendo ocasionar alguna tragedia.
A esto hay que sumarle la posibilidad de situaciones peligrosas, como la presencia de tuberías cortadas y dobladas que representan un riesgo para los transeúntes, quienes podrían tropezar con ellas debido a la falta de visibilidad.
El Parque de la Equidad tampoco escapa a la negligencia del mal servicio. En la avenida Chac Mool, entre las calles 50 y 46, varias luminarias permanecen apagadas.
Las personas que practican deportes como trotar o caminar, así como aquellos que se desplazan en bicicleta, algunos de ellos expresan su preocupación debido a la falta de iluminación.
Los trabajadores se ven obligados a caminar largas distancias a altas horas de la noche e incluso en la madrugada para llegar a los paraderos asignados por sus empresas y transportarlos a sus centros de trabajo a la zona hotelera, Puerto Morelos o la Riviera Maya.
Y es que agregaron que la falta de transporte público seguro los deja vulnerables ante cualquier peligro en su recorrido en medio de la penumbra.
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FAR