Por si no fuera suficiente con que la clínica del Instituto de Seguridad Social y Servicios de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) de Chetumal se encuentre en condiciones de inoperatividad, se dio a conocer que el hospital de Bacalar, también perteneciente al Instituto, permanece en condiciones similares desde el pasado viernes 04 de octubre.
Si bien en este caso la diferencia radica en que el problema no se atribuye al estado actual de la instalación eléctrica del lugar, sino a la falta de pago a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) por el suministro de energía, ambas situaciones sólo demuestran el abandono total por parte de las autoridades al sector salud y la nula importancia hacia la ciudadanía, sobre todo, los pacientes que se encuentran ingresados.
Este problema toma aun más relevancia teniendo en cuenta que los hospitales más cercamos se encuentran Chetumal, donde tampoco podrían ser atendidos los pacientes en caso de que se presente una situación crítica que requiriera un posible traslado; así como los derechohabientes de la ciudad capital tampoco pueden contar con el hospital del ISSSTE de Bacalar, lo cual incrementa el número de personas que realmente están siendo afectadas.
Las consecuencias van desde la imposibilidad de realizar trámites, lo cual impide que los usuarios accedan a constancias de incapacidad, órdenes de laboratorio, certificados médicos, referencias para atención especializada o agendar citas; hasta el hecho de que no cuentan con el servicio de urgencias, que en muchos casos es crucial para salvar vidas.
Asimismo, en esta clínica también existen múltiples carencias, como se ha denunciado sobre la de Chetumal, tanto en cuestión de las condiciones del inmueble y el estado de los aparatos médicos, como en la falta de personal, pues actualmente sólo cuentan con un médico que atiende en horario matutino, por lo que la cantidad de pacientes a atender es mínima, ya que el servicio se termina a mediodía.
Respecto a lo que acontece en este hospital, las autoridades estatales tampoco se han pronunciado ni se han acercado a los afectados para solucionar el problema, aunque lo que se refiere a la falta de energía eléctrica se resuelva pagando el consumo a la CFE, sin embargo, se desconoce cuál es el monto y si es un adeudo reciente o si la dependencia ha sido morosa y, en consecuencia, la Comisión tomó medidas drásticas para presionar.
Mientras tanto, los bacalarenses esperan que las autoridades correspondientes den la cara a la brevedad, porque la situación es crítica y urge que se tomen cartas en el asunto para resolver cual sea la problemática que está arrastrando el ISSSTE, llevándose entre los pies a la ciudadanía.