Con un clima nublado y la amenaza de precipitaciones pluviales, los prestadores de servicios en la zona de playas despertaron a una jornada en la que el número de bañistas ha disminuido considerablemente. En algunas áreas, las corrientes marinas han arrastrado la arena, lo que ha provocado que se acumulen en otras partes del litoral.
Ayer sábado, en las costas del centro, se pudo observar que gran parte de las playas cercanas al muelle de Ultramar no cuentan con arena, debido a que las corrientes marinas han arrastrado el mineral, dejando al descubierto los montículos de piedras que normalmente están cubiertos por la arena durante el verano. La falta de este material ha provocado la erosión de las costas, lo que, a su vez, ha disuadido a los bañistas de acercarse, y ni siquiera los huéspedes de los centros de hospedaje se han hecho presentes en el litoral.
El pescador Vicente Chable indicó que es normal que, durante estas épocas, parte de la arena sea removida por las corrientes. "Aquí hay erosión y ya no tenemos playa para que la gente quiera quedarse", comentó.
El hombre de mar mencionó que, con el paso del tiempo, el muelle Ultramar, así como las escolleras instaladas por los hoteles cercanos, son los principales responsables de la erosión en esta parte del litoral solidarense.
Señaló que, en su momento, esta área contaba con suficiente arenal en los troncos que se encuentran en el puente de El Recodo, pero ahora estos han quedado sumergidos en el océano.
Vicente Chable destacó que, hasta hace 14 años, la instalación de los escollos por parte de las filiales de los centros de hospedaje construidos en la avenida Constituyentes ya estaba causando molestias tanto a los hombres de mar como a los ambientalistas, quienes eran conscientes de las consecuencias que esto acarrearía.
“En estos tiempos, el espacio de arenal que queda es mucho menor que el que teníamos hace más de 10 años. Incluso los hoteles que están en dirección a las playas, como Mamita’s, ya han perdido sus playas durante esta temporada. Luego, el mismo mar vuelve a rellenar, pero antes no existía esa necesidad", comentó.
Destacó que la principal interrupción es que estos hoteles no pueden poner sus camastros y los turistas tienen que estar en el espacio del centro de hospedaje.